La «complementariedad» entre el hombre y la mujer y la posterior denegación de cualquier inferioridad han estado en el centro de la catequesis de Francisco de la audiencia general de hoy, dedicada, en el debate sobre la familia, la relación entre el hombre y las mujeres a la luz de la Biblia. El Papa subrayó la idea de que «el hombre es todo para la mujer y la mujer es todo para el hombre» sin que entre los dos haya una «subordinación», y afirmó que «»¡Debemos revalorizar el matrimonio y la familia!».

«Los hombres y las mujeres son de la misma sustancia y son complementarios», y la historia de la Biblia acerca de la mujer que nace de la costilla del hombre «no expresa inferioridad o subordinación», pero “El pecado genera desconfianza y división entre el hombre y la mujer. Su relación será asechada por mil formas de prevaricación y de sometimiento, de seducción engañosa y de prepotencia humillante, hasta aquellas más dramáticas y violentas. La historia trae consigo las huellas. Pensemos, por ejemplo, en los excesos negativos de las culturas patriarcales. Pensemos en las múltiples formas de machismo donde la mujer era considerada de segunda clase. Pensemos a la instrumentalización y mercantilización del cuerpo femenino en la actual cultura mediática».

El Papa invitó a reflexionar sobre «la reciente epidemia de desconfianza, de escepticismo e incluso de hostilidad que se propaga en nuestra cultura – en particular a partir de una comprensible desconfianza por parte de las mujeres – respecto a una alianza entre el hombre y la mujer que sea capaz, al mismo tiempo, de afianzar la intimidad de la comunión y proteger la dignidad de la diferencia».

»La custodia de esta alianza de los hombres y las mujeres, a pesar de ser pecadores y estar heridos, humillados y confundidos, desanimados e inciertos, es para nosotros, los creyentes, en el estado actual, una vocación difícil y apasionante. El relato de la creación y el pecado, nos muestra al final una imagen bellísima: «El Señor Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles y los vistió» . Es una imagen de ternura hacia ese pareja pecadora que nos deja sin palabras. …Es una imagen de custodia paterma de la pareja humana. Dios mismo cuida y protege su obra maestra», concluyó el Papa.

 

Por favor, síguenos y comparte: