El próximo domingo 7 de septiembre amaneceremos con la noticia de que la Iglesia tiene un nuevo santo. Ese día, en una ceremonia presidida por el Papa León XIV en la Plaza de San Pedro, que iniciará las 10:30 horas (tiempo de Roma), el joven beato Carlo Acutis, quien dedicó parte de su corta vida a expresar su fe de manera coherente e integral y quien en la Eucaristía encontró la fuerza para dar testimonio del Evangelio, será elevado a los altares.
Aportación de León XIV a la canonización de Carlo Acutis
Tras el inesperado fallecimiento del Papa Francisco, el proyecto litúrgico de canonización se reactivó con la elección del nuevo Pontífice, León XIV, quien en junio de 2025 presidió un Consistorio de Cardenales y confirmó solemnemente que Carlo Acutis será oficialmente elevado a los altares el 7 de septiembre de 2025, junto a Pier Giorgio Frassati. Así, el joven milennial se hará santo de la Iglesia en una sola ceremonia, subrayando su perfil de santo contemporáneo, digital y cercano al mundo juvenil.
Sobre su próxima canonización
Carlo Acutis será canonizado en una ceremonia solemne presidida por el Papa León XIV en la Plaza de San Pedro. Miles de fieles y adolescentes, reunidos tras haber vibrado en abril con el Jubileo juvenil, acudirán a contemplar cómo un joven con tenis y pasión digital sube oficialmente a los altares. Será un mensaje claro: la santidad es posible para quienes viven en nuestra época, con sus desafíos y sus oportunidades. Se prevé también la veneración pública de sus reliquias (incluido un corazón incorrupto); se dispondrán misas de acción de gracias y momentos de adoración en las parroquias que lo tienen como patrono. Uno de estos centros carismáticos está en Chicago, bajo el nombre de Blessed Carlo Acutis Parish, comunidad eucarística que encarna su espíritu. De igual forma, en Asís y Roma se reeditarán actos conmemorativos: exposiciones, vigilias juveniles, programas formativos sobre los milagros eucarísticos que él difundió.
Legado actual y espiritualidad viva
Carlo sigue inspirando a miles de jóvenes quienes dicen: “Se parece a mí, vivió en nuestra época, hablaba nuestro lenguaje.” Su causa ha animado programas de catequesis, peregrinaciones, y encuentros juveniles —especialmente durante el Jubileo de los Adolescentes— donde se ha presentado como modelo de santidad digital y cotidiana. Se le considera hoy patrono informal de los interneteros, programadores y de quienes evangelizan online. Su ejemplo ha generado obras audiovisuales, cortometrajes animados, y documentales que lo presentan a nuevos públicos con frescura. Obispos, sacerdotes y educadores han reconocido su impacto: Mons. Sorrentino (Asís) lo ve como “un signo de providencia para devolver la santidad de la vida ordinaria”, y en Filadelfia, Mons. Pérez celebra que “niños y adolescentes se sienten atraídos por él”. En Estados Unidos se construyen centros juveniles bajo su nombre; en Irlanda se filman homenajes con Lego; y en Costa Rica, su segundo milagro fue recibido con gratitud nacional. Su madre, Antonia Salzano, confiesa que Carlo la recondujo a Dios y que “ofreció su vida y sufrimiento por el Papa y la Iglesia”. En sus últimas palabras, le animó a no temer, a confiar en Jesús que “abrió las puertas del Cielo”, y pidió que su historia siguiera “haciendo felices a los demás”.
Un Santo de la Edad Digital
Carlo Acutis representa un nuevo tipo de santidad: contemporánea, amable, digital, real y radicalmente eucarística. Su vida ordinaria, intensa, ha demostrado que la amistad con Jesús es posible dentro del colegio, del código, de la vida cotidiana. Hoy, la Iglesia lo reconoce oficialmente como San Carlo Acutis, ejemplo vivo para quienes desean responder con fe real al reto de ser “originales” en un mundo que tiende a convertirlo todo en fotocopias.
Carlo Acutis y los jóvenes en la nueva evangelización
Carlo nos mostró que la santidad es perfectamente vivible con el corazón de un adolescente y los medios de su tiempo. Su vida se convirtió en un puente intergeneracional, conectando a las nuevas generaciones con la fe: para quienes crecieron con redes sociales, videojuegos o código, él demostró que todo esto puede ser herramienta de evangelización. Apodado “influencer de Dios”, Carlo acercó a quienes, en el entorno digital, buscan belleza, sentido y esperanza. Su pronta canonización, junto a Pier Giorgio Frassati, confirma que la Iglesia apuesta por la juventud y por un modelo de santidad moderno, accesible y profundo – especialmente para millennials y Generación Z.
Hito clave
A los 15 años, Carlo diseñó y lanzó en Internet una Exposición Internacional de Milagros Eucarísticos, compuesta por más de 160 paneles visuales que narran eventos extraordinarios reconocidos por la Iglesia en diversas épocas y lugares. Esta iniciativa no fue un simple proyecto escolar: se convirtió en una muestra itinerante, presente en miles de parroquias y centros educativos de los cinco continentes –incluida la exposición permanente en la Basílica de Guadalupe, México– mostrando cómo Dios sigue obrando hoy en el mundo. Gracias a esta obra, Carlo transformó la catequesis y la evangelización: con un formato visual, dinámico y apoyado en evidencias, avivó un interés renovado por la presencia real de Cristo en la Eucaristía. Gracias a él, esas imágenes y testimonios pasaron del círculo académico a la vida cotidiana de la Iglesia, convirtiéndose en material formativo y litúrgico para educadores, catequistas y jóvenes.
Información tomada del eBook gratuito Carlo Acutis, Historia, vida y anécdotas. Descárgalo en: www.ewtn.es/ebook-carlo-acutis/
Reflexión para nuestra vida cristiana
- Haz de la Eucaristía tu camino diario. No basta asistir ocasionalmente a Misa: la frecuencia genera cambio real en el corazón.
- Contempla la gracia recibida. Permítete ser transformado, viviendo con mayor compasión, sinceridad y entrega.
- Lleva a otros al encuentro. Con la devoción y testimonio, invita a tu círculo (familia, amigos, jóvenes) a descubrir la Eucaristía como fuente de esperanza.
- Rechaza lo superficial. Como Carlo, evita convertirte en “una fotocopia” sin propósito; aprovecha las oportunidades sacramentales para vivir auténticamente.
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 31 de agosto de 2025 No. 1573