Por Gilberto Hernández García
La convocatoria que el Papa Francisco hizo para la Jornada de oración y ayuno por la paz fue secundada a lo largo y ancho del mundo por diversas comunidades eclesiales cristianas de diversas denominaciones y por líderes de religiones no cristianas.
En el Medio Oriente
Muy significativa fue la plegaria interreligiosa «por las intenciones del Papa Francisco», que Gran Muftí de Siria, Ahmad Badreddin Hassou, presidió en la mezquita de los Omeyas en Damasco, Siria, con participación de sunníes, chiíes, alauitas, ismaelitas, drusos, cristianos e incluso judíos. El líder sunní de Siria emitió también un edicto de ayuno especial el sábado, simultáneo al convocado por el Santo Padre.
Días antes, Ahmad Badreddin Hassou escribió al Papa Francisco para decirle que se uniría a la Jornada de oración y ayuno «para pedir a Dios que nos ayude a encontrar el camino de la paz, que pasa a través de la reconciliación y el perdón recíproco entre sirios».
En Jordania, la celebración principal fue convocada en la iglesia de «Sayidat Al Salaam» («Nuestra Señora de la Paz») de Ammán, con la participación del nuncio en Jordania y personalidades de otras religiones. En tanto, en Beirut, el patriarca maronita Bechara Rai, convocó a todos a rezar en basílica de Nuestra Señora del Líbano, que fue escenario de un inolvidable encuentro nocturno del Papa Benedicto XVI con los jóvenes de Oriente Medio el 15 de septiembre del año pasado, precisamente para rezar por la paz en Siria.
Iglesia Caldea de Irak
Por su parte, el Patriarca de Babilonia de los Caldeos Louis Raphael I Sako llamó a la Iglesia caldea y a todos los iraquíes a participar en la jornada de ayuno y oración por Siria convocada por el Papa: »En solidaridad con el deseo del Papa Francisco y con su invitación a la oración y el ayuno con la intención de pedir la paz y la estabilidad en Siria, Oriente Medio y en el mundo pedimos a todos los obispos católicos que inviten a sus fieles, hijos e hijas, a ayunar junto con todos los hombres de buena voluntad en el mundo, para que termine el sufrimiento de millones de hombres y cese la destrucción causada por la violencia».
En Turquía
El Patriarca Ecuménico de Constantinopla Bartolomé I recibe el llamamiento del “hermano en Cristo, Papa Francisco” para orar y ayunar por la paz en Siria, pidiendo también a los líderes internacionales reunidos en San Petersburgo para la cumbre del G20 que promuevan una solución negociada y no un conflicto militar en Siria. «El Patriarcado Ecuménico y nosotros personalmente estamos siguiendo con inquietud la evolución de la situación en Siria y, más en general, en todo el Oriente Medio. Oremos para que la paz prevalezca. Además sólo la paz permitirá a los cristianos de Oriente Medio seguir viviendo sin ningún impedimento en aquellas tierras donde nacieron».
Además expresó que “la Iglesia de Constantinopla aplaude la iniciativa promovida por el Obispo de Roma Francisco de hacer un llamamiento a los cristianos de todo el mundo para que el próximo sábado todos se reúnan para orar y ayunar, pidiendo que prevalezca la paz en martirizada tierra de Siria, con la esperanza de que Dios ilumine las mentes de los responsables políticos, y se eviten acciones militares que se traducirían inevitablemente en la muerte de víctimas inocentes”.
Los hindúes
El ayuno y la oración por la paz en Siria han unido a los cristianos e hindúes en la India, según expresó monseñor Félix Machado, Obispo de Vasai y Presidente de la Comisión para el Diálogo ecuménico e interreligioso de la Federación de las Conferencias Episcopales de Asia: «El llamamiento del Papa para vivir una jornada especial por la paz en Siria ha sido recibido con alegría y entusiasmo por los cristianos en la India, y inmediatamente se ha extendido a los líderes y a las comunidades hindúes. Algunos líderes hindúes me han llamado por teléfono para expresar su solidaridad y asegurar la participación en el ayuno y la oración en los templos hindúes».
Conferencia de Iglesias de Europa
También los Presidentes de la Conferencia de las Iglesias Europeas y del Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa se unieron a la iniciativa papal por la paz e hicieron pública una declaración que titularon “Juntos por la paz”.
En ella expresan que ante el sufrimiento, destrucción y muerte que el noble pueblo sirio padece desde hace ya demasiado tiempo «insistimos en nuestro rechazo absoluto a la guerra. En este momento, nuestro recuerdo se dirige en especial a todos los fieles cristianos y a sus familias, que el conflicto en Siria ha perjudicado particularmente, con numerosos asesinatos y un éxodo en masa que puede llegar a cancelar una presencia más que milenaria en esta área del mundo».
En la declaración firmada por Christopher Hill, Presidente de la Conferencia de las Iglesias y el Cardenal Péter Erdő, Presidente del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa, se lee: «Somos consientes de que la verdadera paz tan sólo viene de Dios. A Él hemos de confiar los corazones atormentados de la humanidad, rezar por nuestra paz interior y la de las personas en conflicto».
Además afirman: «Nunca es demasiado tarde para construir un futuro juntos. Esta paz tanto anhelada sólo puede ser alcanzada juntos, nunca a través del abuso de unos sobre otros. Estamos convencidos de que, con la ayuda de Dios, el sentido común puede prevalecer y alcanzar una convivencia pacífica en la verdad, en la justicia, en el amor, en la libertad y en el respeto de todas las minorías, en particular de los cristianos presentes en el país».