El Papa Francisco encontrará a ancianos y abuelos el próximo 28 de septiembre en la Plaza de San Pedro durante la primera jornada internacional dedicada a la tercera edad que organiza el Pontificio Consejo de la Familia. El encuentro, cuyo lema es »La bendición de la larga vida», coincide con el Día de oración por el Sínodo de la Familia y está inspirado en las numerosas intervenciones del Pontífice sobre la situación de las personas mayores en las que ha recordado la tragedia de la cultura del descarte que corresponde a un »pueblo que no custodia a sus ancianos» y en la que se »descarta a los ancianos, con actitudes tras las cuales hay una eutanasia escondida».
El arzobispo Vincenzo Paglia, Presidente del dicasterio, ha presentado la Jornada o como una ocasión para reafirmar que los ancianos »no son solo objeto de atención y cuidados, sino también sujetos de una nueva perspectiva de vida». »Gracias a Dios -ha añadido- la expectativa de vida ha crecido, pero por otra parte, este dato no ha llevado aparejado un enfoque pertinente ni en la política, ni en la economía, ni en la cultura. Por lo tanto, hay que replantearse la ancianidad y el compromiso de los ancianos en el mundo y en la Iglesia. Y también el de la Iglesia hacia ellos».