El huracán Mateo es una de las tormentas tropicales más catastróficas de la última década: ha dado un golpe muy duro en Haití, donde causó al menos 19 heridos. Esta es una tormenta de categoría 4, con vientos que han alcanzado una velocidad de 230 km/h. La parte sur del país fue el más afectado por el huracán.
El huracán sorprendió todo el país. Todas las escuelas de Haití permanecerán cerrados hasta el próximo lunes 10 de octubre. La tormenta se dirige a las Bahamas y al sureste de los Estados Unidos. Era necesario posponer las elecciones presidenciales en el país programado para el próximo domingo.
“Las comunicaciones con las zonas del sur del país son muy difíciles. Los salesianos están tratando de ayudar a las personas más vulnerables, ya que se teme que, con el desbordamiento de varios ríos y de la inundación de muchas carreteras, podría haber un resurgimiento del cólera, presente en el país desde hace 6 años”, dijo el Padre Hubert Mesidor, delegado de Comunicación Social en la Visitaduría de Haití y que fue entrevistado por ANS.
Los salesianos en “Les Cayes” tienen la capacidad de informar acerca de las condiciones de su trabajo: La puerta principal se había arrancado, el sistema eléctrico de la casa se derrumbó, un edificio administrativo y otra estructura utilizada para celebrar misas fueron dañados y el patio fue totalmente devastado – no ha quedado ningún árbol, ni han sobrevivido los animales de granja. También la catedral y algunas Iglesias de la ciudad se han visto afectadas destruyéndose los techos.
La Fundación Rinaldi, activa en Haití, aún no puede decir mucho sobre la necesidad de las intervenciones, ya que hasta ahora era imprudente salir al exterior. Sin embargo, están listos para actuar, consciente de que en toda la zona sur de la ciudad existe una necesidad por las diferentes situaciones.
El huracán Mateo va a agravar la situación de muchas familias que ya viven en condiciones extremadamente difíciles tras el terremoto del 12 de enero de 2010.
