La Escuela Don Bosco de Kenitra es toda una institución en la moderna ciudad de Marruecos. La obra salesiana pertenece a la inspectoría de Francia-Bélgica Sur, pero a pesar de estar en un mundo de mayoría musulmana, el carisma salesiano es igual que en el resto del mundo. En ella estudian 1.200 alumnos y el rostro de Don Bosco aparece en un gran edificio blanco. En el patio los niños ríen juegan y se divierten como es típico de una escuela salesiana.
La escuela ofrece educación de acuerdo con los programas oficiales del país: coexisten cursos en francés y en árabe. Los profesores son todos musulmanes y el curso del Islam es obligatorio, excepto para tres estudiantes cristianos. El carisma salesiano, sin embargo, se difunde por la presencia constante del director entre los jóvenes. Para Nouâman Haddouch, “entre todos los elementos de la pedagogía salesiana, la presencia es la más importante en este caso”.
Lo más destacado, como en toda obra salesiana, son los “buenos días salesianos. Esta mañana hablé de la respuesta que debemos dar a la violencia con la no violencia -explica el padre Vega-. He citado un pasaje del Corán que dice que hay que protegerse de la violencia y que debemos perdonar”.
Este año, el tema propuesto por la educación católica en Marruecos (ECAM), es No a la violencia y se nutre con todas las actividades educativas de la escuela y se extiende a las actividades con los padres, con los educadores y a través de conferencias…
Cada año el misionero salesiano organiza la Semana de la Cultura, en la que se ofrece una oportunidad para que los padres y los niños descubran las enseñanzas y la vida de Don Bosco.
La pedagogía del «Educador salesiano musulmán»
Muchos educadores han aprendido y comparten la pedagogía salesiana y muchos profesores, como Habhoud Mohamed, se consideran “salesianos musulmanes”.
“El espíritu de Don Bosco puede estar entre los judíos, los cristianos y los musulmanes. Actúo y pienso de manera salesiana”.
Él es el autor de un libro sobre Don Bosco publicado en árabe para conmemorar el Bicentenario del Nacimiento de San Juan Bosco y fue difundido entre los padres de los estudiantes.
Los Salesianos llevan adelante, con los colaboradores, un conjunto de 1.200 alumnos musulmanes de la escuela elemental, del colegio y de la escuela profesional; una parroquia de 120 católicos, casi todos de África subsahariana, así como un gran número de actividades culturales y deportivas.
“Debemos hacernos aceptar por los musulmanes, convertirnos en amigos en quien apoyarse. Sólo una vez que hayamos logrado ese fin podemos hacer bien a sus almas como quería Don Bosco”, asegura uno de los salesianos.
