En días pasados la dimensión de Justicia, Paz, Reconciliación, Fe y Política (JPRFP) ofreció una capacitación a la Arquidiócesis de Morelia sobre construcción de paz y acompañamiento a víctimas de las violencias.
Se trata de un primer taller de inducción sobre el Enfoque de Transformación Social en construcción de paz dirigido a unos 30 agentes de pastoral y posibles voluntarios encargados de los centros de escucha para el acompañamiento a víctimas de las violencias que se habilita en la Arquidiócesis de Morelia. Es parte de la respuesta que la Iglesia mexicana está haciendo para atender la crisis de la violencia por la que atraviesa el país, y de manera particular, el estado de Michoacán.
La dimensión JPRFP considera importante enfatizar que los centros de escucha no son eventos aislados, sino que forman parte de la estrategia nacional de construcción de paz propuesta por la Pastoral Social. Deben complementarse a otras herramientas y metodologías para atender la problemática de las violencias desde una mirada más integral, de respuesta donde se trabaje desde diferentes ámbitos como la familia, los jóvenes, los niños, la educación, la mujer.
Ya los obispos lo han señalado en su exhortación Que en Cristo nuestra Paz, México tenga Vida Digna, la violencia e inseguridad es multicausal que debe ser abordado como un problema de salud pública, que requiere respuestas multidimensionales.
El centro de escucha es un espacio físico seguro para acoger a las víctimas de las violencias y busca acompañarles de manera integral desde la dimensión: pastoral, espiritual, psicosocial y jurídica.
Pero el centro de escucha por sí solo no responde a las necesidades que hay de construcción de paz, es necesario que se comprenda que éste forma parte de un proceso de transformación social mucho más amplio que busca incidir en las comunidades para reconstruir el tejido social y donde las víctimas atendidas se conviertan en agentes de cambio en sus propias localidades.
