“Recemos junto al Santo Padre, a la Iglesia entera, por las vocaciones sacerdotales, por la santificación del Clero, en esta Solemnidad del Sagrado Corazón y también por intercesión de la Santísima Virgen María”, esta es la invitación de Monseñor Andrés Gabriel Ferrada Moreira, Secretario del Dicasterio para el Clero, en vista de la Jornada Mundial de Oración por la Santificación del Clero, que se celebra este 16 de junio, Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús.

Por Renato Martinez – Vatican News

Este viernes, 16 de junio, se celebra la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, día en el cual la Iglesia universal también celebra la 28 Jornada Mundial de Oración por la Santificación del Clero, instituida por San Juan Pablo II, en 1995.

En Vatican News dialogamos con Monseñor Andrés Gabriel Ferrada Moreira, Secretario del Dicasterio para el Clero, quien nos explica la importancia de la oración del pueblo de Dios por la santificación de los sacerdotes, porque el corazón de Cristo nos muestra la ternura y la misericordia de Dios, que son los rasgos más hondos, más hermosos, de la vida de un sacerdote.

El pueblo que ora responde a lo que el Señor nos dice en el Evangelio, “rogad al dueño de los sembrados, que envíe operarios para sus sembrados”. Nosotros pedimos para que tengamos santos sacerdotes en este día del Sagrado Corazón de Jesús, que es también la Jornada Mundial de Oración por el Clero, por la santificación del Clero.

Oremos, el significado de la oración es grande, porque el Señor lo ha puesto como el primer trabajo, la primera tarea de la pastoral vocacional. Orar por los que ya son sacerdotes y orar para que el Señor nos dé muchos nuevos sacerdotes.

Los sacerdotes que la Iglesia necesita para la misión, para la evangelización, para llevar el aliento a los pobres, a los marginados, a los descartados, para celebrar los sacramentos, para acompañar a las comunidades y para ir en búsqueda de las personas alejadas o de los que se han ido por caminos que no los llevan a la vida.

Oremos por la santificación de los sacerdotes en el día de Sagrado Corazón, porque el corazón de Cristo nos muestra la ternura y la misericordia de Dios, que son los rasgos más hondos, más hermosos, de la vida de un sacerdote. Misericordia y ternura, es la presencia de Cristo que, como Buen Pastor va en búsqueda de la oveja descarriada.

¿Por qué se eligió esta fiesta del Sagrado Corazón de Jesús para pedir por la santificación de los sacerdotes?

La elección viene de mucho tiempo atrás y es porque el corazón de Cristo propiamente refleja un corazón sacerdotal, en el sentido de que, aquel que está dedicado totalmente al servicio de sus hermanos, qué es lo propio del sacerdocio ministerial y también del diaconado en la Iglesia, el ministerio ordenado al servicio del pueblo de Dios para ayudarlo, para servirlo, para que camine unido en comunión hacia la patria, podríamos decir, hacia la casa del Padre. Y el corazón de Jesús es de dónde se bombea el amor de Dios precisamente para ser que todos los hermanos y hermanas del pueblo de Dios, del santo pueblo de Dios, puedan ejercitar, vivir y animar su sacerdocio bautismal.

¿Cuáles son las iniciativas que el Dicasterio está promoviendo para esta Jornada y para poder fortalecer la formación permanente del Clero?

El Dicasterio promueve, y es su misión, la formación inicial y permanente del Clero, es decir, de los diáconos y sacerdotes, para cumplir su misión entre otras cosas organiza encuentros de formación. Por ejemplo, un curso de formación para sacerdotes aquí residentes en Roma a través de todo el año o en febrero próximo, con el favor de Dios, un gran encuentro aquí en Roma para todos los responsables de la formación permanente del clero del mundo entero. Además, fomenta la santificación del clero a través de su contacto asiduo, constante, con las distintas Conferencias Episcopales y también con los obispos diocesanos del mundo entero recibiéndolos aquí en Roma o yendo a su encuentro según nuestras posibilidades y según los requerimientos que ellos nos hagan.

Recemos junto al Santo Padre, a la Iglesia entera, por las vocaciones sacerdotales, por los sacerdotes, por las vocaciones diaconales, por los diáconos, recemos por los jóvenes en discernimiento, hagámoslo en esta fiesta, en esta Solemnidad del Sagrado Corazón y también por intercesión de la Santísima Virgen María.

 

Imagen de Cristian Gutiérrez, LC en Cathopic


 

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