Editorial

Sin lugar a duda es Jesucristo el que reivindica a la mujer no como inferior o “igual” al hombre, sino como un ser capaz de albergar la visión total de la vida. Los últimos papas —aunque la crítica secular lo ignore— han sido partidarios del cambio de paradigma que ahora toma las riendas de muchos países en el mundo.

En su radiomensaje del 14 de octubre de 1956 a los participantes en la peregrinación al Santuario de la Virgen de Loreto, el venerable Pío XII dijo que la mujer es “la coronación suprema de la creación, de la que en cierto sentido representa la obra maestra”.

Su sucesor, San Juan XXIII, al recibir, el 1º de junio de 1962, a las delegaciones de la juventud femenina católica de la arquidiócesis de Milán, recordó que el ejemplo de las mujeres ha cambiado al mundo al “tener palabras qué decir a quienes están alejados de Dios”.

San Pablo VI, en el rezo del Ángelus del 17 de agosto de 1975, señaló: “Estamos convencidos de que en la concepción cristiana de la mujer hemos de encontrar el reconocimiento de sus derechos humanos y civiles, y la defensa de sus superlativas prerrogativas naturales, bajo la luz rectora y protectora de Aquella que, radiante de belleza y santidad, maternal con Cristo se eleva por encima de los destinos humanos, María.”.

El beato Juan Pablo I en el Ángelus del 10 de septiembre de 1978, dijo, ante un mundo desgarrado por las guerras, que Dios “siempre tiene los ojos abiertos sobre nosotros, aunque parezca de noche. Él es padre; más que eso, Él es madre.”

Ni qué decir de san Juan Pablo II: el 8 de marzo de 1998, en el Ángelus acusó a la sociedad: “Somos lamentablemente herederos de una historia de enormes condicionamientos, que ha hecho difícil el camino de la mujer, a veces mal reconocida su dignidad, mal representadas sus prerrogativas y no pocas veces marginada.” Y Benedicto XVI, también en el Ángelus, pero del 8 de marzo de 2009, exigió que a las mujeres “se les respete cada vez más su dignidad y se valoricen sus potencialidades positivas”.

El colofón lo pone el papa Francisco en la audiencia general del 8 de marzo de 2023: “a las mujeres les agradezco su compromiso con la construcción de una sociedad más humana, gracias a su capacidad para captar la realidad con una mirada creativa y un corazón tierno. ¡Este es un privilegio exclusivo de las mujeres!”

 

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 7 de julio de 2024 No. 1513

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