Monseñor Hipólito Reyes Larios, arzobispo de Xalapa conversó con El Observador sobre el problema de la migración y el ejemplo de San Rafael Guizar y Valencia.
Por Jesús V Picón
¿Cómo percibe la crisis humanitaria en la frontera norte?
El trayecto que recorren los migrantes se vuelve peligroso por la falta de acuerdos internacionales y por las organizaciones que se dedican al tráfico de personas. A esto agreguemos lo que padecen los migrantes desde hace 15 años: delincuencia organizada, extorsiones y asesinatos.
¿Cómo se vive en Veracruz esto?
El estado se ha convertido en un expulsor de migrantes, en California hay muchas comunidades Veracruzanas. Esto por la falta de empleo y las situaciones de violencia, aunque ha disminuido esto, hay meses que ha estado muy difícil.
¿Cómo enfrenta la Iglesia estas situaciones?
Las caritas diocesanas y parroquiales, las casas de migrantes son los mecanismos con los cuales la Iglesia ha enfrentado estas problemáticas. Sin embargo hace falta generar más conciencia, pues cada uno está metido en el ámbito y sólo cuando sale en las noticias nos impacta, pero eso es pasajero.
¿Qué le parece el Papa Francisco?
Yo le decía al Papa en la visita ad limina que en México los católicos teníamos 3 símbolos: Jesucristo en sus diversas advocaciones, la Virgen María y sus advocaciones y el tercero es el Papa. El me contesto que en los países donde ha habido persecución el Sumo Pontífice siempre ha significado mucho. Y es verdad por ejemplo, en el fin de la cristiana, el Papa tuvo un papel importante. Es el papa idóneo para este tiempo de la historia.
¿Qué nos dice el ejemplo de San Rafael Guizar y Valencia?
En primer lugar su entrega a Dios, en segundo lugar su creatividad para predicar el evangelio en situaciones adversas. Hay quien le decía que hacía puras locuras, pero creo eso es propio de los santos. Llegaba a todas las personas. Estuvo en varios países y realizó una fuerte labor misionera. Se preocupaba porque la gente pudiera tener acceso al sacramento de la reconciliación.
Un mensaje final
Se debe seguir fomentando el valor de la familia, el amor por la vida, la procreación, la educación de los padres a los hijos, no debemos dejar por ideologías de moda. El mensaje cristiano es bastante sólido y profundo.
Sean santos, la santidad se da más cuando hay épocas de crisis. Hay que alimentarse de la palabra de Dios, del cuerpo y sangre de Cristo, hay que ser fraternos y amigables para llevar a Cristo a todos los corazones.
