Se aviva nuestra esperanza de ir creando entre todos una nueva tierra.
Estas son nuestras armas:
La palabra de Jesús,
su vida y su ejemplo,
su verdad,
sus promesas,
su evangelio,
su fuerza.
Para un Tiempo Nuevo
Aquí están tus hijos,
aquí está tu pueblo,
con mil esperanzas
y con mil proyectos,
para un Tiempo Nuevo
y una nueva tierra,
para un nuevo mundo,
para un siglo nuevo.
Ligeros de equipaje y ambiciones
pues sólo tu palabra es el pan nuestro,
caminamos, Señor, cual caminaba
tu pueblo, paso a paso en el desierto.
Nuestra esperanza es sólo tu promesa.
Nuestro alimento, el pan hecho tu cuerpo.
Nuestro valor, la fuerza de tu cruz.
Nuestra norma, los signos de tu Reino.
Aquí están tus hijos,
aquí está tu pueblo,
con mil esperanzas
y con mil proyectos
para un Tiempo Nuevo
y una nueva tierra,
para un nuevo mundo,
para un siglo nuevo.
La vida se hace a veces cuesta arriba,
a veces el camino se hace incierto;
mas si aprieta la duda, nos alumbra
la luz de tu palabra y de tu ejemplo.
Nuestro consuelo es siempre tu certeza.
Nuestra bandera es siempre tu evangelio.
Nuestra verdad es siempre tu verdad.
Nuestra gloria, la gloria de tu Reino.
Aquí están tus hijos,
aquí está tu pueblo
con mil esperanzas
y con mil proyectos
para un Tiempo Nuevo
y una nueva tierra,
para un nuevo mundo,
para un siglo nuevo.
Letra: José Antonio Olivar
Música: Juan Antonio Espinosa
La grabación, junto con 13 canciones más, se encuentra en el CD «Al Señor del Nuevo Siglo» y la partitura en el libro del mismo título (EDIBESA /www.edibesa.com)
