Por Felipe ARIZMENDI ESQUIVEL, Obispo de San Cristóbal de Las Casas |
Ciertamente el aumento en las gasolinas, en el gas y en las tarifas de consumo eléctrico, que afectará severamente a toda la economía, en particular a los más pobres, nos hace temer un año no muy próspero. La reforma energética aprobada no está correspondiendo a lo prometido de que bajarían los precios de esos consumos básicos, pues la economía nacional no depende sólo de propagandas políticas y electorales, sino de múltiples factores del sistema económico mundial, que de por sí beneficia a unos pocos super ricos, con un grave daño para la vida digna de los pueblos, a quienes se excluye del progreso social. Ante esto, no faltan candidatos populistas, que dicen tener una como varita mágica para revertir estas medidas económicas. Lo mismo nos ofrecieron los actuales gobernantes. Por ello, no hay que ser ingenuos, sino críticos ante las ofertas electorales.
Los recortes hechos al presupuesto nacional reducirán en gran medida los recursos que se esperaban para los Estados del país, afectando gravemente al desarrollo de los pueblos. No habrá los recursos necesarios para atender la salud, para la sustentabilidad del campo y para la autosuficiencia alimentaria. Se frenarán desarrollos carreteros y apoyos a los municipios. Se deberían también resentir los recortes al dinero destinado a los partidos, a los legisladores y a las campañas electorales, para lo cual pareciera que sobra dinero, que se tira y va a la basura.
Sin embargo, hemos de animarnos a luchar para salir adelante, con la fe y la confianza puesta en Dios, que no nos deja sin el pan de cada día, pero también con la búsqueda de alternativas para obtener algún ingreso extra, educando a los niños y jóvenes en el trabajo familiar, y siendo austeros para no gastar en aquellas cosas que no sean tan necesarias.
Es muy importante que conozcamos las reformas que los legisladores locales hicieron a la Constitución Política de Chiapas, pues se ha dicho que se legisla a favor de una mayor presencia de las mujeres en la vida pública, que se toman en cuenta los derechos de los pueblos indígenas, que desaparece el “diputado para migrantes”, que habrá posibilidad de reelección en las diputaciones locales, en las presidencias y cabildos municipales, etc. Deberíamos conocer a fondo lo que estas reformas traen para nuestro Estado.
