La Basílica de Guadalupe y otros Santuarios alrededor del mundo congregaron a cientos de fieles para orar por la paz
Por Sergio Estrada
Mater Fátima es un gran evento mundial que se celebró el pasado 4 de abril, coincidiendo con el fallecimiento de San Francisco Marto, uno de los pastorcitos protagonistas del encuentro con Nuestra Señora, en Fátima (Portugal).
A este proyecto se unieron más de cincuenta santuarios marianos en todo el mundo, entre los que se hallan la Basílica de Guadalupe, Nuestra Señora de Lourdes en Francia y la Divina Misericordia
en Polonia.
«Mater Fátima, es un proyecto que nos llevó al centenario de las apariciones a San Francisco Marto, vidente de Fátima, quien invitó al mundo a unirse en oración para alcanzar las peticiones que nos dejó la Virgen en Portugal, por la paz universal en este momento en que está muy necesitado, comenzando en el corazón de los hombres, las familias, en la Iglesia y en la sociedad universal», comentó Fernanda Ochoa, integrante de la coordinación del Rosario Mundial por la Paz en México.
La vida de San Francisco Marto es un ejemplo por su santidad, es un modelo a seguir porque enseñó de manera heroica la valía del sufrimiento y del sacrificio. La Virgen vino a educar y reunió a sus fieles en una Hora Santa, un Rosario, una Misa y la consagración para todos y, en especial para Rusia. Para la preparación de Monfort se utilizó la consagración que recitó San Juan Pablo II en 1984 para consagrar al mundo.
«Este evento fue a nivel mundial en diferentes santuarios del mundo como: la Basílica de Guadalupe en la CDMX; el Santuario de la Virgen del Pilar, en Zaragoza España; el Santuario de la Gran promesa del Sagrado Corazón en España; en Polonia, el santuario de la Divina Misericordia; en Francia, el Santuario de la Virgen de Lourdes; en el Salvador, el santuario de nuestra señora de la paz. Este movimiento de Fátima ya llegó a China, Honduras Nueva Zelanda, Australia y Holanda, entre otros, todos unidos por la paz», explicó Fernanda Ochoa.
Fe y oración, binomio para los cambios
Durante las apariciones de Fátima, la oración de tres niños evitó la entrada de Portugal a la Segunda Guerra Mundial. Se estima que por el «Rosario Mundial por la Paz» se reciban muchas gracias más para el mundo, evitando muchas catástrofes.
Se pidió por la consagración de Rusia, la paz en el mundo y la reparación en los corazones de Jesús y María, debido a que la Virgen ha pedido esto, pero aún no se ha realizado, y porque el mensaje de Fátima sigue vigente recurriendo a la oración en este momento.
Consagración al corazón inmaculado de María
Él quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón.
A quien la abrace, prometo la salvación; y serán queridas de Dios estas almas, como flores puestas por mí para adornar su trono. 13 de Junio de 1917
Publicado en la edición impresa de El Observador del 7 de abril de 2019 No.1239