Los Talleres de Oración y Vida surgieron de la iniciativa del sacerdote franciscano capuchino Ignacio Larrañaga, originario de Azpeitia, España.
En 1984 inició la obra de los Talleres de Oración y Vida (TOV), a cuya consolidación dedicó unos diez años.
SUS RAZONES
Para el padre Ignacio, lo principal de la vida cristiana es mantener «una amistad viva con Jesucristo», y obviamente sin oración personal esto no es posible. El escribió: «Desde hace años, al recorrer numerosos países, había ido yo constatando un hecho: entre nosotros, en general, no se enseña a orar.
«Hay mucha reflexión en los grupos eclesiales, es verdad, así como un copioso estudio sobre la Palabra en los círculos bíblicos y en las diversas comunidades cristianas.
«Pero aún en estos casos no se enseña a orar, al menos de una manera metódica, ordenada y progresiva. Y mientras tanto, el pueblo se muere de hambre de Dios.
De este modo, «yo venía sintiendo que algo debía hacerse en este sentido: en el sentido de tomar de la mano al pueblo creyente y guiarlo hacia el trato personal con el Señor a fin de transformar a cada cristiano en amigo y discípulo del Señor».
LO QUE ENSEÑAN
«Fundamentalmente los TOV entregan a los fieles un método práctico para aprender a orar; y orar de una manera ordenada, variada y progresiva: desde los primeros pasos hasta las profundidades de la contemplación.
«Este aprendizaje, sin embargo, no es teórico como en un curso sino práctico como en un taller. En un taller se aprende trabajando y se trabaja aprendiendo. En nuestro caso los verbos aprender y trabajar se refieren a la actividad orante: orando se aprende a orar. Tiene, pues, el Taller de Oración una connotación eminentemente experimental y práctica».
Así pues, un Taller de Oración y Vida no es una reunión para aprender información acerca de los distintos tipos de oración cristiana, sino verdadera práctica para aprender a orar.
APROBACIÓN ECLESIÁSTICA
Así, se trata de un servicio a la Iglesia que además ha sido reconocido y probado por la Santa Sede en 1997 y confirmado, según el Decreto de Aprobación dado por el Concejo Pontificio para los laicos el 4 de octubre de 2002.
Esto permitió su expansión por decenas de países, gracias a la colaboración de más de 18 mil Guías con que actualmente cuentan los TOV en todo el orbe.
¿EVANGELIZACIÓN?
Los TOV están enseñando a la gente a orar, de una manera experimental y progresiva, introduciéndola en la oración litúrgica y en la vida sacramental.
Por ello se puede decir que estos Talleres también son una nueva forma de evangelización, pues constituyen una presentación vibrante y activa de Jesús.
La misión del Guía es implantar a Dios vivo en los corazones.
LOS EJES
En los TOV, Jesucristo es el principio, el centro y la meta.
En cuanto al método, está íntegramente basado en la Biblia. El eje de cada sesión es la lectura y meditación de la Palabra. Para todos los días de la semana, durante cuatro meses, se les señala a los participantes, textos del Antiguo y Nuevo Testamento para meditarlos y rezarlos en sus casas, con una pedagogía especial.
Con el sistema de los TOV se aprenden la lectura rezada, la lectura meditada, la oración escrita, la oración de abandono, y la oración de contemplación, entre otras.
MODALIDADES
Hay talleres para todo tipo de personas que quieran aprender a comunicarse con el Señor de una manera variada y progresiva. Por tanto, TOV ofrece:
- Talleres para adultos.- A partir de los 30 años. Son quince sesiones, una por semana, de dos horas cada una.
- Talleres para jóvenes.- De 20 a 30 años de edad. Son diez sesiones, una por semana, de una hora y 45 minutos.
- Talleres para adolescentes.- De 13 a 19 años. Son ocho sesiones, una por semana, de una hora y 45 minutos.
- Talleres para niños.- De7 a 12 años de edad. Son diez sesiones, una por semana, de una hora y 15 minutos cada una.
- Encuentro de Experiencia de Dios.- Son cinco días de fuerte experiencia espiritual de silencio y soledad.
- Círculos de Oración y Vida.- Conformados por ex talleristas que dedican una parte de su tiempo a la oración acompañando a todos los que sufren.
TOV ofrece su servicio evangelizador a parroquias, empresas, universidades, colegios y grupos en general. Casi todas las parroquias mexicanas ofrecen al menos alguna vez al año esta experiencia a los feligreses.
El padre Ignacio Larrañaga falleció el 28 de octubre de 2013 en Guadalajara, Jalisco; pero su obra sigue viva.
Redacción
TEMA DE LA SEMANA: UN TALLER PARA APRENDER A ORAR
Publicado en la edición impresa de El Observador del 11 de agosto de 2019 No.1257