Sin duda estos son tiempos de violencia extrema. A veces pareciera que ya todo está perdido, que humanamente es imposible conducir al mundo hacia la paz.
«Esperábamos paz, y nada va bien; tiempo de curación, y llega el terror» (Jeremías 8, 15).
San Josemaría Escrivá diagnosticó el problema con estas palabras: «Un secreto a voces: estas crisis mundiales son crisis de santos».
Ahora bien, ¿existe una solución ante todo este caos? La respuesta es sí. Y ciertamente dicha solución no es humana sino divina, pero depende de la cooperación humana para que ésta tenga lugar. El Papa Pío XI la definió en 1925 con estas palabras: «Buscar la paz de Cristo en el Reino de Cristo», pues «no hay medio más eficaz para restablecer y vigorizar la paz que procurar la restauración del reinado de Jesucristo».
Hay que instaurar con urgencia el Reinado de Jesús, primero en los individuos —comenzando por uno mismo, claro—, y de ahí establecerlo en las familias, en las sociedades, en las naciones y así, finalmente, en todo el mundo.
Por supuesto que habrá mucha resistencia —el rechazo a Dios es inmenso—, y de hecho la plenitud del Reinado de Cristo sólo será posible hasta su Segunda Venida. Pero no por eso hay que desanimarse pues, aunque a primera vista no parezca claro, lo cierto es que lo que se hace en pro del Reinado divino trae beneficios reales y concretos.
Un ejemplo
En la fiesta de Cristo Rey de 1931, el episcopado portugués consagró su país a Jesús, y desde entonces la estuvo renovando cada año. Como consecuencia, Portugal recibió una especial protección durante la Segunda Guerra Mundial, pues Hitler había planeado ocupar el país a finales de 1940, pero sus planes quedaron frustrados.
De hecho, esa consagración de Portugal para que Dios reinara en el país produjo otras tres importantes cosas: Hubo un gran renacimiento de la vida católica, se produjo una reforma política y social, y se alcanzó el milagro de la paz al ser la nación preservada del terror comunista, especialmente cuando la Guerra Civil Española bramaba en la puerta de al lado.
En estos tiempos
En algunos lugares del mundo ya se está tomando nueva conciencia de la necesidad de vivir bajo las leyes y la protección divinas. Aquí hay algunos ejemplos recientes:
- En 2016 los obispos y el gobierno de Polonia entronizaron a Cristo declarándolo el Rey del país. La ceremonia se hizo con la presencia oficial del presidente de Polonia, Andrzej Duda, y además la consagración de los polacos al Rey de reyes y Señor de señores se repitió en todas las catedrales y parroquias polacas.
En la primera mitad del siglo XX Dios ya había revelado a la monja polaca Rosalie Tselakuvny (1901-1944) que su país tenía salvación, pero que sólo sería completa si Cristo era nombrado Rey de Polonia.
- Christine Nogueira do Reis Tonietto, más conocida como Chris Tonietto, es una abogada de 27 años, que desde octubre de 2018 es diputada federal de Brasil por Rio de Janeiro.
Al iniciar su trabajo en el Congreso, Chris Tonietto dijo en su breve discurso: «Quiero consagrar nuestro mandato a Cristo, Rey del Universo, a Nuestra Señora de Aparecida, Patrona de Brasil, que es la tierra de la Santa Cruz. Quiero confirmar aquí mi compromiso moral en defensa de la vida desde la concepción, en defensa de los valores cristianos, en combate al aborto, a la ideología de género, a la corrupción y a la criminalidad. Insto a la juventud brasileña a no perder la esperanza en nuestra nación. Quiero servir a mi patria con todo amor, ética, idoneidad moral y vigor a que tanto inspira mi fe católica.
«Deseo a todos un excelente y bendecido mandato, y que Dios bendiga nuestras acciones en esta casa legislativa. ¡Viva Cristo Rey».
- Con la salida de Evo Morales de Bolivia, hay cosas que ya están cambiando. En sus casi 14 años en el poder, el entonces presidente se caracterizó por su anticristianismo al hacer declaraciones contra el clero de su país, al asegurar que la fe católica fue introducida para someter a la gente, y al pretender que Benedicto XVI democratizara la Iglesia, aboliera el celibato e introdujera el sacerdocio femenino. Igualmente, Morales introdujo el culto idolátrico oficial a la diosa tierra, la Pachamama, con estas palabras:
«Iniciamos el mes de la Pachamama con una ofrenda de agradecimiento. Durante cada viernes del mes de agosto realizamos este ritual para agradecer la generosidad de la Madre Tierra».
En esta ceremonia pagana Evo Morales oró a la Pachamama pidiéndole «que siga el crecimiento económico».
El domingo 10 de noviembre de este año, poco antes de la renuncia de Morales, tres líderes de la oposición — Luis Fernando Camacho, Marco Pumari, y Eduardo León— ingresaron al Palacio de Gobierno, donde rezaron tras colocar una Biblia sobre una bandera de Bolivia. ¿El resultado? Camacho lo describió así: «¡Dios volvió al Palacio y 15 minutos después empezaron las renuncias de todo los delincuentes de este país! Sólo se llevó una Biblia a Palacio, una Biblia y una carta de renuncia y a los quince minutos renunció el presidente.
«Este gobierno renunció sin una bala por parte del pueblo, renunció sólo con la fe puesta en Dios».
Un pastor protestante boliviano ha dicho: «La Biblia está volviendo a Palacio de Gobierno. Nunca más volverá la Pachamama. Hoy Cristo está volviendo a Palacio de Gobierno. Bolivia es para Cristo».
Por su parte, Jeanine Áñez, que era la vicepresidenta del Senado y que en este momento es la presidenta interina de Bolivia, se dirigió al Palacio de Gobierno, llevando una Biblia de grandes dimensiones. Ella dijo: «Esta Biblia es muy significativa para nosotros. Nuestra fuerza es Dios, el poder es Dios, que Dios nos bendiga queridos hermanos bolivianos», y muchos de los presentes respondieron gritando: «¡Gloria a Dios!».
Redacción
TEMA DE LA SEMANA: EL FIN DEL CALENDARIO LITÚRGICO: CRISTO REY
Publicado en la edición impresa de El Observador del 24 de noviembre de 2019 No.1272