Me permito comunicar las instrucciones correspondientes para que se apliquen en los templos de la Arquidiócesis Primada de México las medidas de higiene que ayuden a evitar la propagación del virus Covid-19.
Estas indicaciones son totalmente preventivas y, por lo tanto, hago un llamado a no generar ni entrar en pánico, así como a informarse en fuentes de información fidedignas y no difundir noticias no oficiales.
De esta manera se solicita a los fieles seguir las recomendaciones dadas a conocer por la Secretaría de Salud de la Ciudad de México y de la Secretaría de Salud Federal para evitar posibles contagios como lo son:
- Evitar saludar de beso o de mano, para impedir un posible contagio.
- Lavarse bien las manos, al menos, durante 20 segundos, y hacerlo de manera frecuente, en especial, cuando se esté en espacios públicos.
- No tocarse ojos, boca y nariz sin antes haberse lavado las manos.
- Evitar el contacto cercano con personas que se sospeche pudieran estar infectadas.
Las siguientes son las indicaciones que deben llevar a cabo los sacerdotes y los fieles en todos los templos de esta Iglesia particular, a fin de evitar la propagación del virus:
Los sacerdotes:
- Deben abstenerse de celebrar públicamente la Santa Misa si presentan el más leve indicio de la enfermedad.
- También deben abreviar al máximo el tiempo de la celebración, incluyendo la homilía, a fin de que las personas no permanezcan mucho tiempo juntas en un lugar cerrado. (Queda a su criterio la omisión de los cantos, procesión de ofrendas y otro tipo de actividades que alarguen la celebración).
- Realizar la Colecta posterior a la Comunión para evitar que la gente maneje dinero y se contamine las manos antes de recibirla.
- Pedir que quien distribuya la Comunión se purifique los dedos con agua y jabón, o mediante el uso de un gel antibacterial. Al momento de dar la Sagrada Comunión es preferible omitir la fórmula: “el Cuerpo de Cristo”, a fin de evitar cualquier emisión involuntaria de saliva o, en su defecto, usar en ese momento un cubrebocas.
- Instruir a los fieles para recibir la comunión en la mano, vigilando estrictamente se lleve a cabo con el cuidado debido.
- Si durante la Celebración se realiza el sacramento de la Confesión, el sacerdote y los fieles deben usar el cubrebocas.
- Al finalizar la Santa Misa, instruir a los fieles sobre las medidas que recomiendan las autoridades sanitarias para que los fieles tomen conciencia de la responsabilidad que tienen para cuidar su propia salud y la de los demás.
Los fieles:
- No tomarse de las manos al momento de rezar el Padrenuestro.
- Omitir el gesto físico –saludo de mano, abrazo o beso- del Rito de la Paz.
- Recibir con toda reverencia la Comunión en la mano, y consumirla inmediatamente frente al ministro.
- Orar intensamente a fin de pedir la intercesión maternal de la Santísima Virgen de Guadalupe, pidiendo su auxilio y protección en esta situación.
+ Carlos Cardenal Aguiar Retes
Arzobispo Primado de México