Recorriendo Tierra Santa de la mano de Abraham
Se acerca el tiempo litúrgico más importante para los cristianos, y con él, la oportunidad de peregrinar de manera virtual por Tierra Santa de la mano de nuestro padre en la fe, el padre Abraham. El sacerdote Juan Solana, quien está al frente de Magdala Center, y promotor de esta iniciativa, nos cuenta los detalles
Por Rubicela Muñiz
Padre Juan, Magdala es un lugar al que le gusta recibir peregrinos y, no pudiendo hacerlo presencialmente, ahora los recibirán de manera virtual. Platíquenos sobre
ésta necesidad.
▶ No sé si es estrictamente una necesidad, pero yo considero que el mundo entero es como un organismo y en ese organismo hay diversos órganos, diversas funciones, diversos miembros como los ojos, los brazos, el hígado, el estómago y la Tierra Santa es parte importante de ese organismo, porque es la tierra donde se gestó la revelación de Dios que culminó la vida de Cristo y que de ahí partió luego para todo el mundo, a los cuatro puntos cardinales.
Entonces, recorrer de vez en cuando la Tierra Santa hace mucho bien. Le hace bien a los peregrinos que vienen aquí y seguramente le hará bien, también, a los que virtualmente puedan hacer esta visita. Ya tuvimos la experiencia anterior en el mes de octubre y la gente lo agradeció mucho, por eso nos animamos a repetir esta experiencia en esta Cuaresma, en esta Semana Santa.
La peregrinación virtual del pasado mes de octubre estuvo de la mano de la Virgen del Rosario y ahora será de la mano del padre Abraham, ¿por qué lo han escogido a él?
▶ En primer lugar de la mano de Abraham, porque queriendo hacer una peregrinación en la fe, la Iglesia reconoce a Abraham como nuestro padre en la fe, el que salió de su tierra, siguió el llamado de Dios, obedeció, fue probado en su fe, y del cual Dios iba a hacer nacer el pueblo elegido y luego del pueblo elegido, la iglesia universal. Lo reconocemos como nuestro padre en fe, así lo recita también la liturgia. Entonces, por ese motivo pensamos en recorrer la Tierra Santa de la mano de Abraham. ¿Por qué escogimos el tema de la fe? Pues la vida cristiana es como una mesa de cuatro patas: una pata es lo que creemos, las verdades fundamentales de la fe; otra pata son los sacramentos que alimentan esa fe y la celebran; la tercera es la vida moral, los mandamientos de la ley de Dios; y la cuarta pata es la oración, porque nosotros tenemos que orar, tenemos que dirigirnos a Dios, tenemos que respirar en nuestra alma.
¿Y cómo será ahora está peregrinación, qué elementos integrará?
▶ El formato de esta peregrinación será igual que el anterior dado que fue bueno, a la gente le ayudó. Vamos a tener una hora de catequesis bíblica, teológica, doctrinal, visitando lugares santos, en la medida de lo posible, que evoquen esas verdades. Y la segunda hora será la misa celebrada con la liturgia cuaresmal. También vamos a mezclar tres elementos: el credo, que será la línea guía de nuestras reflexiones, de nuestro recorrido; segundo, la Tierra Santa, los lugares santos que evoquen esas verdades del credo, y tercero la liturgia cuaresmal. Tres elementos para ver si podemos trenzarlos de algún modo para tener una linda experiencia de fe.
Aunque estemos en pandemia y en casa, no debemos olvidar la importancia de prepararnos para la Cuaresma.
▶ En la pandemia, en casa y en todos los tiempos de la vida y de la historia tenemos que tener un poco de todo. La imitación de Cristo, una expresión simpática que me gusta: “Después del invierno viene el verano, después de la noche viene el día y después de la tormenta viene la calma”. Quiere decir que hay un momento para cada cosa en la vida, y eso la iglesia lo ha ido formulando sobre todo con las dinámicas del año litúrgico: tiempo de fiesta, tiempo de penitencia, tiempo de expectación, tiempo de celebración, tiempo ordinario.
Hay un poco de todo y yo creo que en esa mezcla está el gusto, en esa mezcla de sabores está el disfrutar el año, el disfrutar el tiempo de nuestra vida.
¿Cómo vivir esta peregrinación para sentir que estamos ahí, que seguimos las huellas de Jesús?
▶ Aquí me remito a la experiencia que muchas personas nos refirieron el pasado mes de octubre. Nos decían que se sentían verdaderamente aquí con nosotros, nos decían que se sentían recorriendo la Tierra Santa como si estuvieran en nuestra compañía. Por otra parte, a la gente le diría que, quien quiera seguir esta peregrinación virtual, se busque el mejor momento del día para seguirla bien, si interrupciones, concentrado, atento. Muchas gentes suelen seguir series en la televisión o internet y cuando uno se engancha con una serie quiere seguirla, no quiere perderla, y si me permiten, y sin ningún ánimo de vantarme en ello, me gustaría que quien haga esta peregrinación la siguiera como una serie, de inicio a fin, y que vaya siguiendo este recorrido.
Tengo entendido que el registro va muy bien, ¿esto los anima más?
▶ Efectivamente, el primer día que abrimos el registro de esta peregrinación se apuntaron casi 30 mil personas. 30 mil personas es muchísimo, es una sorpresa muy agradable y yo les agradezco a todos su confianza, su entusiasmo, su deseo de seguir esta experiencia. Esto nos anima. Esperamos que la gente haga una linda experiencia que enriquezcan su vida cristiana y su vida espiritual. Me entusiasma que con esta experiencia las personas puedan experimentar el amor de Dios.
Inscríbete
» Fecha de inicio: 15 de febrero
» Inscríbete en: https://www.magdala.org
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 31 de enero de 2021 No. 1334