Durante esta época en nuestra familia nos sentimos muy agradecidos con Dios por todos sus beneficios y dones recibidos.
Por Gaby Briones
Desde que iniciamos educando en casa, fijamos vacaciones desde el primer día de Adviento hasta día de Reyes, para poder disfrutar y meditar todo lo que abarca el inicio del año de nuestra Santa Madre la Iglesia.
Poco a poco hemos ido incorporando actividades. Escuchando mucho a nuestros hijitos y con su apoyo hemos hecho las actividades para Adviento y Navidad.
Me encantaría compartirte lo que hacemos con la finalidad de que adopten lo que gusten de acuerdo con sus tiempos y a las necesidades espirituales de tu familia. Desde ya, oro por ustedes.
La primera actividad que hemos realizado es leer un capítulo del Evangelio de San Lucas (después de la cena y como inicio de nuestra oración de la noche). Buscamos con esto introducir a los niños a su examen de consciencia a través de la vida de Cristo. Increíblemente fue algo que nos ha ayudado mucho como familia. Hace tres años que lo empezamos y desde entonces los niños nos piden leer este Evangelio del día 1 al 24 de diciembre.
El año pasado anexamos otra actividad llamada Árbol de Jesé. Personalmente desconocía la genealogía de Jesús a fondo y esta actividad nos dio mucho rumbo. Cada mañana leíamos el pasaje bíblico del personaje correspondiente. Utilizamos la Biblia Ilustrada del Padre Lorenzo Lovaski, hay librerías católicas donde puedes comprarla. Además de ser muy acorde los textos para los niños, las ilustraciones les ayudan a imaginar el tiempo de cada pasaje y a encontrar algunos puntos de apoyo a la hora de ir a la Sagrada Eucaristía. Ellos verdaderamente logran a su corta edad vincular lo que aprenden en casa y lo que escuchamos en la Liturgia de la Palabra.
La tercera actividad que hemos hecho es la Novena de Navidad. Inicia el día 16 de diciembre y la puedes encontrar en algunas páginas católicas.
Cada año procurábamos vivir las posadas en familia o en la comunidad con las Madres Clarisas. Por pandemia no ha podido ser posible, pero el Señor nos regaló tenerlas aquí en casa con nuestros tres chiquitos en el 2020. Las dirigía mi esposo por la noche, antes de cenar, pero los niños desde en la mañana elegían un villancico que ensayaban con instrumentos musicales y al concluir el canto de la Posada bailaban, tocaban y cantaban el villancico. Este año ya están muy listos para realizarlo nuevamente.
Algo que no puede faltar es la corona de Adviento. En años anteriores llevábamos un manual de Taller del Encuentro Matrimonial Mundial y nos reuníamos en casa de mis suegros a hacer las dinámicas. El año pasado, desde casa lo vivimos, diferente, pero con profundidad en la intimidad de nuestra Iglesia doméstica.
Espero que estas actividades y recursos te sean útiles para esperar el nacimiento del Niño Dios. Que Él nos encuentre muy cercanos a Su Corazón en este Adviento, tiempo de amor y de reflexión.
¿Cómo viven ustedes el inicio del año litúrgico?
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 12 de diciembre de 2021 No. 1379