Meditación y oraciones hacia el sosiego
Padre mío, me abandono a Ti. Haz de mí lo que quieras.
Lo que hagas de mí Te lo agradezco, estoy dispuesto a todo, lo acepto todo.
Con tal que tu voluntad se haga en mí y en todas tus criaturas, no deseo nada más, Dios mío.
Pongo mi vida en tus manos; te la doy, Dios mío, con todo el amor de mi corazón, porque Te amo, y porque para mí amarte es darme, entregarme en Tus manos sin medida, con infinita confianza, porque Tú eres mi Padre. Amén.
TEMA DE LA SEMANA: “¿ES POSIBLE LA PAZ INTERIOR? LOS SANTOS TIENEN LA RESPUESTA»
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 23 de octubre de 2022 No. 1424