Las historias de vida recopiladas a lo largo de este reportaje demuestran una fuerte falla por parte del Estado mexicano en su manejo del proceso migratorio.
Por Rodolfo Azomoza Pastor
Proveniente de Venezuela, Wilmer se vio en la necesidad de emigrar debido a la relación que su hermano tenía con la banda de crimen organizado llamada Los Colectivos, en Caracas. Aunque no portan armas, este grupo responde directamente al gobierno venezolano y es considerada una organización peligrosa con fuertes conexiones y recursos.
El acontecimiento que desató la necesidad de Wilmer y su familia de huir fue una confrontación entre Los Colectivos y una de las pandillas que operan en la capital, resultando en la victoria de la pandilla. Al concluir el enfrentamiento, el hermano de Wilmer huyó del país. Por consecuencia, la familia de Wilmer fue amenazada y tuvieron que abandonar sus vidas en Venezuela.
El trato que han recibido él y su familia ha sido muy malo por parte de los mexicanos. Comentó que ha sido víctima de insultos en diferentes partes del país, que la gente se les queda viendo a él y a su familia, y que el trato que ha recibido pésimos tratos por parte de los agentes migratorios. Además, la policía lo ha detenido múltiples veces y ha debido pagar sobornos para evitar ser arrestado.
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 9 de julio de 2023 No. 1461