Este día 4 de octubre la Iglesia celebra la fiesta de un popular santo que es conocido entre los católicos y no católicos por su vida de pobreza, castidad y la obediencia a Dios.
No dejes de leer y conoce 10 datos sorprendentes de San Francisco de Asís:
- El Santo Padre expresó que eligió el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís. “Para mí es el hombre de la pobreza, el hombre de la paz, el hombre que ama y custodia la creación; en este momento, también nosotros mantenemos con la creación una relación no tan buena, ¿no? Es el hombre que nos da este espíritu de paz, el hombre pobre”.
- Nació en Asís (Italia), en el año 1182. Durante su juventud vivió una vida de ricos, diversiones, gastaba el dinero de manera ostentosa y solo le importaba divertirse en la vida. Hasta que un día escucho la voz de Dios: “Francisco, repara mi Iglesia, pues ya ves que está en ruinas”.
- Francisco renunció a la herencia de sus padres y una vida de lujos. Se dedicó a cuidar a los pobres, a los enfermos, a la naturaleza y se entregó por completo a Dios. Atendió el auxilio del leproso, en lugar de huir como era costumbre en aquella época. Movido por el Espíritu Santo se acercó y le dio un beso. A partir de ese momento cambio su vida y se lamentaba constantemente llorando por sus pecados.
- Pasaba los días haciendo oración y ayuno. Su aspecto y su conducta cambiaron por completo, lo que hacía que la gente se burlara y lo llamarán loco. Por su parte, su padre enfureció y lo golpeo en diversas ocasiones y en una de ellas lo encerró para que recapacitara y tomara su antigua vida.
- Dios le concedido el don de profecía y el don de milagros. Cuando pedía limosna para reparar la iglesia de San Damián, acostumbraba decir: “Ayudadme a terminar esta iglesia”. Enseguida Francisco tuvo pronto numerosos seguidores y algunos querían hacerse discípulos suyos.
- Llegó a ser conocido como el Pobre de Asís por su matrimonio con la pobreza, su amor por los pajarillos y toda la naturaleza. Todo ello refleja un alma en la que Dios lo era todo, un alma que se nutría de las verdades de la fe católica y que se había entregado enteramente a Cristo crucificado.
- Francisco amaba a los animales y sentía un gran cariño por ellos, pero también tenía poder sobre ellos, por ejemplo: las anécdotas de los pajarillos que venían a escucharle cuando cantaba las grandezas del Creador, del conejillo que no quería separarse de él en el Lago Trasimeno y del lobo de Gubbio amansado por el santo.
- Recibió los estigmas mientras realizaba un ayuno de 40 días. Un discípulo que lo acompañó dijo: “de repente vio una visión de un serafín, un ángel de seis alas en una cruz. Este ángel le dio el don de las cinco llagas de Cristo”. Esto sucedió en 1224 durante un ayuno de 40 días en el Monte Alvernia.
- Al enterarse que le quedaban pocas semanas de vida, dijo “¡Bienvenida, hermana muerte!” y pidió que lo llevaran a Porciúncula. Murió el 3 de octubre de 1226 después de escuchar la pasión de Cristo según San Juan. Tenía 44 años de edad. Lo sepultaron en la Iglesia de San Jorge en Asís.
- San Francisco contribuyó mucho a la renovación de la Iglesia de la decadencia y el desorden en que había caído durante la Edad Media. El ayudó a la Iglesia que vivía momentos difíciles.
Sin duda alguna existen más datos importantes de la vida de este gran santo, que no nos alcanza para compartir en este espacio. La vida de Francisco nos enseña a saber contagiar ese entusiasmo por Cristo a los demás y predicar siempre con el ejemplo y con la palabra.
Publicado en Arquidiócesis de Monterrey
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