No hay mejor manera de iniciar un nuevo año que encomendando tu vida, tu familia, tus necesidades e intenciones a Nuestro Señor, por medio del recurso más valioso e irremplazable que existe: la Sagrada Eucaristía.
En este 2024 que comienza, ofrece una misa para que Dios te llene de bendiciones.
Cuando ofreces una o más Misas no sólo estás obteniendo los dones invaluables y gracias infinitas de Jesús, que se hace presente en cada celebración eucarística, sino que además tú mismo estás siendo partícipe del puente de caridad que une a personas como tú con aquellos sacerdotes que, en el mundo entero, sufren persecución, violencia o necesidad material.
El estipendio de la Santa Misa que tú ofreces con amor y generosidad, en muchas regiones del mundo es el único sustento con el que pueden contar los sacerdotes que dedican su vida entera a llevar los sacramentos y el amor de Dios a quienes más los necesitan.
Que la protección y amor de Santa María de Guadalupe guíe tus pasos y llene tu corazón de paz en este nuevo año.
Bendiciones.
Pbro. Astolfo Moreno Salamanca
Ayuda a la Iglesia Necesitada