La última semana del Papa Francisco ha estado marcada por varios encuentros significativos y documentos importantes. Hace unos días se vivió un momento histórico en el atrio de la basílica de San Pedro: Francisco entregó de la bula de convocación del Año Santo 2025. El Pontífice también participó en los Estados Generales de la Natalidad. Y es que en un mundo donde las armas y los anticonceptivos son las «inversiones que dan más ingresos y en una sociedad donde las madres se ven obligadas a elegir entre el trabajo y los hijos, urgen “políticas eficaces” dijo el Papa Francisco.
Asimismo, a los más de 1,000 niños del norte de Italia que acaban de hacer la confirmación, el Santo Padre les explicó que “los abuelos son personas sabias y buenas” y les regaló un rosario como recuerdo del viaje. Destaca la audiencia que mantuvo el Papa con la comunidad de la Abadía de Montevergine, cuyo Santuario custodió, durante la Segunda Guerra Mundial, la Sábana Santa para salvarla de los bombardeos y la Audiencia Privada con el presidente de Ecuador.
Por último, en preparación hacia la I Jornada Mundial de los Niños, programada el 25 y 26 de mayo en el Estadio Olímpico de Roma, el Papa Francisco intervino en la mesa redonda «Niños, generación del futuro» donde encabezó un tierno intercambio de preguntas y respuestas con los pequeños.
