El beato Carlo Acutis es el futuro santo que traerá alegría entre los jóvenes. Fue beatificado en Asís en el año 2020, y el 23 de mayo pasado el Papa Francisco aprobó un milagro atribuido por su intercesión. Carlo fue un joven defensor de los más débiles en los entornos escolares, así como de los niños que padecen alguna discapacidad. Era aficionado al fútbol y a los videojuegos y ahora su corazón es considerado una reliquia que se expone en la Basílica de San Francisco en Asís.

Le gustaba relacionarse con el mundo de la informática y los ordenadores, y también compartía aficiones por el cine, la redacción de boletines y el voluntariado. Era un devoto ferviente de la Virgen María, expresaba continuamente que Ella es una madre amorosa en la cual todo ser humano es capaz de confiar. A la edad de siete años recibió su Primera Comunión en el silencio del monasterio de Bernaga en Perego. Asistía a misa diaria, rezaba el rosario y visitaba la Eucaristía. Generoso y caritativo con los demás, le gustaba la cultura del ahorro, considerando la evangelización como un signo de esperanza. Su vida, sus reflexiones, su forma de pensar y actuar hoy se revelan a través de sus frases. He aquí una recopilación de ellas.

1.- Estar siempre unido a Jesús, ese es mi proyecto de vida.

2.- Una vida solo es verdaderamente bella si llegamos a amar a Dios, pero sobre todo al prójimo como a nosotros mismos.

3.- ¿Por qué los hombres se preocupan tanto de la belleza de sus cuerpos y luego no se preocupan de la belleza de sus almas?

4.- ¿De qué le sirve al hombre ganar mil batallas si luego es incapaz de ganarse a sí mismo?

5.- Si Dios posee nuestro corazón, poseeremos el Infinito.

6.- La vida es un regalo porque mientras estemos en este planeta podemos aumentar nuestro nivel de caridad. Cuanto más alto sea, más disfrutaremos de la Bienaventuranza Eterna de Dios.

7.- Sin Él no puedo hacer nada. Sólo los que hacen la voluntad de Dios serán verdaderamente libres.

8.- Pide ayuda continuamente a tu ángel de la guarda. Tu ángel de la guarda tiene que volverse tu mejor amigo.

9.- Al estar ante Jesús Eucaristía nos hacemos santos.

10.- La Virgen María es la única mujer en mi vida.

11.- No yo, sino Dios. La santificación no es un proceso de suma, sino de resta. Menos “yo”, para dejar espacio a Dios.

13.- Lo único que debemos pedirle a Dios en oración es el deseo de ser santo.

14.-Nuestra alma es como un globo aerostático. Si por casualidad hay un pecado mortal, el alma cae al suelo. La Confesión es como el fuego debajo del globo que permite al alma volver a elevarse. Es importante ir a confesarse con frecuencia.

15.- Nuestra meta debe ser lo infinito, no lo finito. Lo infinito es nuestra patria. El cielo nos ha estado esperando desde siempre.

16.-La conversión no es más que mover la mirada de abajo hacia arriba, un simple movimiento de los ojos es suficiente.

17.- Estoy feliz de morir, porque he vivido mi vida sin perder un minuto en aquellas cosas que no agradan a Dios.

18.-Ofrezco todo el sufrimiento que tendré que sufrir por el Señor, por el Papa y por la Iglesia para no tener que estar en el Purgatorio e ir directo al Cielo.

19.- No hablo con palabras, solo me recuesto sobre su pecho, como San Juan en la Cena.

20.- Sólo los que hagan la voluntad de Dios serán verdaderamente libres.

21.- Después de la Eucaristía, el Santo Rosario es el arma más potente para combatir el demonio.

22.- ¡Criticar a la Iglesia significa criticarnos a nosotros mismos! La Iglesia es dispensadora de tesoros para nuestra salvación.

 

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 16 de junio de 2024 No. 1510

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