Por Miriam Apolinar

Después de permanecer ocultas durante 80 años, un conjunto de imágenes sacras que coronan el presbiterio del Templo de Nuestra Señora de la Asunción, en Santa María Huiramangaro, Michoacán, han sido restauradas. Estas valiosas piezas, que datan del siglo XVI, fueron reveladas gracias al trabajo conjunto de expertos en restauración y conservación del patrimonio cultural. Este milagroso hallazgo fue comunicado el pasado mes de diciembre del 2024, a través de las redes sociales del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

El trabajo fue encabezado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y en colaboración con la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, el Fondo de Apoyo a Comunidades para la Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos, el Centro INAH Michoacán, así como del Ayuntamiento de Pátzcuaro y el Comité Adopte una Obra de Arte AC.

¿Qué descubrieron los restauradores?

La restauradora y encargada del proyecto de conservación, Laura Elena Lelo de Larrea, explicó que la obra más antigua data del siglo XVI, corresponde a la creación del conjunto de imágenes que, entre otros, representan las figuras de los santos Pedro y Pablo, las santas Catalina de Alejandría y Águeda de Catania, y la Sagrada Familia, con Jesús niño portando el hábito franciscano.

“Este proyecto permitió recuperar una obra extraordinaria en la cubierta horizontal del altar mayor y descubrir la evolución artística, técnica e iconográfica que define este recinto religioso”, señaló la Dra. Lelo de Larrea López, perito-restauradora del Centro INAH Michoacán.

La especialista abunda que estos personajes, que coronan el presbiterio del Templo de Nuestra Señora de la Asunción, conforman una hagiografía (historia de la vida de los santos) pocas veces vista en Michoacán, pues cayó en desuso en el siglo XVII, cuando se privilegiaron temas relacionados con la Virgen María, Cristo o un santo en particular.

Esta restauración, dice, forma parte de una iniciativa mayor para proteger y rehabilitar los bienes patrimoniales resguardados en esta iglesia, como lo fue un par de retablos de estilo plateresco, intervenidos en 2022 y 2023.

Así fue el riguroso proceso de restauración

El proceso de restauración incluyó diversas intervenciones detalladas que permitieron revelar elementos únicos de la obra original, según informó el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Entre las acciones realizadas destacaron:

  • Limpieza de polvo y deyecciones.
  • Fumigación y consolidación de madera.
  • Eliminación de repintes modernos.
  • Reintegración cromática con pinturas al barniz en faltantes de la capa pictórica.

Al avanzar en estas labores, supervisadas por el Centro INAH Michoacán, las restauradoras a cargo de la intervención, Joselia Cedeño Paredes y Gabriela Fernanda Contreras González, constataron la existencia de tres capas pictóricas distintas, en el entablado del presbiterio.

Siglo XVI: Pintura al templo con delicadas veladuras, visibles en las aureolas y los paisajes de fondo.

Siglo XVII: Óleos en tonalidades vibrantes, como verdes y naranjas, usados ​​para resaltar volúmenes en las vestimentas.

Siglo XX: Pinturas acrílicas empleadas para retocar encarnaciones y rostros, buscando embellecer la ornamentación del presbiterio sin alterar significativamente el diseño original del siglo XVI.

Lelo de Larrea comentó que similar a lo ocurrido en estos retablos, durante la intervención de la cubierta horizontal, se observó que esta fue objeto de una remodelación durante los años 40 del siglo XX, cuando se le aplicó un repinte general de pintura blanca, con diseños en azul, “una redecoración que provocó la alteración de la fisonomía del lugar”.

Sin embargo, estos resultados representan un avance significativo en la recuperación del ajuar religioso del Templo de Nuestra Señora de la Asunción; no obstante, el siguiente desafío será la intervención del retablo colateral faltante, ubicado en el presbiterio, al cual seguiría la correspondiente a la cubierta horizontal de la nave del templo, donde la policromía virreinal permanece oculta.

Con los procesos técnicos antes descritos, también se restauraron canes, tabicas y cordones franciscanos, elementos que conforman el arranque de la techumbre exterior del templo.

La importancia de esta restauración para la cultura y la religión.

El Patronato del Templo de Santa María Huiramangaro lidera la restauración del Templo de Santa María de la Asunción, ubicado en Huiramangaro, Pátzcuaro. Esta iniciativa, promovida con gran esfuerzo por la comunidad, se presenta como un ejemplo de unión y compromiso hacia la preservación del patrimonio cultural y religioso de la región.

El presidente del Patronato, Ramiro Chávez, expresó su agradecimiento a todos los que hicieron posible la realización de este proyecto largamente anhelado: “Todos luchamos como comunidad para sacar adelante esta obra, que representa no solo nuestra fe, sino también nuestro compromiso con nuestra historia y nuestras raíces.”

La obra pictórica rescatada del presbiterio no es solo un destacado ejemplo de la iconografía de los santos mártires, sino también un registro tangible de las transformaciones artísticas que el templo experimentó a lo largo de más de cuatro siglos. Este tipo de intervenciones ofrecen un invaluable vistazo a la evolución cultural de Michoacán.

Por su parte, el presidente municipal de Pátzcuaro, Julio Arreola, subrayó la relevancia de este logro para la localidad: “Hoy no solo restauramos un edificio, estamos recuperando nuestra historia y dejando un legado para las futuras generaciones. Este templo es un símbolo del esfuerzo y unión de nuestra gente”.

Restauración: Más que una obra, un compromiso con el legado histórico

Los trabajos de restauración incluyen la recuperación de elementos originales, eliminando repintes añadidos en el pasado y restaurando las molduras y tablas que componen esta joya histórica. Este esfuerzo colectivo es un claro testimonio del compromiso por preservar el legado cultural y religioso de Michoacán, proyectando su importancia para las generaciones venideras.

El presidente municipal reafirmó su compromiso de seguir apoyando proyectos similares: “Estamos construyendo un futuro donde nuestra cultura e historia son parte clave del desarrollo. Este templo nos recuerda la grandeza de nuestras raíces, y seguiremos trabajando para que este tipo de proyectos sigan sucediendo”.

Además, hizo un llamado a la población para valorar y cuidar lo que se ha logrado: “Este templo es un orgullo para todos nosotros. Cuidemos juntos lo que hemos logrado, porque nuestra historia es la base del futuro que queremos construir”.

  • En la iglesia de Santa María Huiramangaro los restauradores descubrieron la rica evolución artística, técnica e iconográfica que ha marcado a este recinto religioso. La intervención reveló una rica y colorida iconografía con tres capas pictóricas superpuestas. La más antigua, del siglo XVI, corresponde a la creación del conjunto de imágenes que, entre otros, representan las figuras de los santos Pedro y Pablo, las santas Catalina de Alejandría y Águeda de Catania, y la Sagrada Familia, con Jesús niño portando el hábito franciscano.
  • La temática exalta a los mártires, es decir, pone de ejemplo la vida de aquellos primeros hombres y mujeres que se convirtieron al cristianismo y que, al momento de su muerte, alcanzaron la salvación divina.

¿Qué es un retablo?

*Es un bien mueble estructurado con un esquema arquitectónico, ordenado a partir de elementos horizontales y verticales, por encontrarse necesariamente adosado a un muro del templo, se le considera también “inmueble por destino”.

¿Cómo se clasifican?

*Los retablos se clasifican según su tipo, por la naturaleza plástica de las imágenes que los componen. Pueden ser:

*Esculturas.

*Pinturas o mixtos.

La clase

*La clase de retablo se define por el método de manufactura y los componentes presentes;

*en este sentido pueden ser colaterales, si cumplen con las características generales de un retablo, es decir, que observen altar, predela, cuerpos y calles, además de que la imagen central esté rodeada de figuras secundarias que enriquecen su importancia;

*se denominan retablos nichos a los compuestos por un fanal u hornacina con columnas o pilastras y una escultura como pieza central (puede o no tener predela y remate como partes constitutivas);

*un retablo marco es una pintura de caballete o relieve en madera rodeado de componentes arquitectónicos como predela, columnas o pilastras y remate.

El material

Otra clasificación es por el material que lo soporta y entonces pueden ser de:

* Madera.

* Tela.

* Mural.

 

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 26 de enero de 2025 No. 1542

 


 

Por favor, síguenos y comparte: