Hace 15 años se fundó la asociación «Qohélet» cuya finalidad es rescatar a jóvenes que han caído en las adicciones. El presidente de este organismo es Benjamín Córdova García, un ex adicto que pudo reinsertarse en la sociedad gracias a las experiencias vividas en el Sistema Integral de la Nueva Evangelización (SINE).
FRUTO DEL SINE
Benjamín recuerda: «Dios me agarró con enjundia, me dio la oportunidad y la pesqué, así se me abrieron las puertas; tomé todo el programa de formación del Sistema Integral de la Nueva Evangelización, del padre Alfonso Navarro, y cuando me di cuenta ya estaba dando retiros, en misiones, como laico consagrado, hasta que me dije: ‘esto es lo que quiero de mi vida’, porque Dios me dio una oportunidad, pero somos muchos los que hemos caído en violencia y adicciones».
Benjamín comenzó a trabajar en un programa de prevención y rehabilitación junto con el padre Navarro. Con el tiempo se fundó «Qohélet». La estrategia de trabajo está dirigida a la familia. «Es de contacto directo y flexible, por lo que incluye apoyo psicológico para ayudar a las personas a resolver sus conflictos; apoyo académico para que los jóvenes superen problemas de enseñanza; deportes para que aprendan a trabajar en equipo, a tener límites y a desarrollar habilidades sociales, y promueve también la salud integral. Se imparten talleres a unos 450 usuarios .
El presidente de «Qohélet» reflexiona: «Este proyecto creció porque a mí Dios me encontró y la gente que se ha ido sumando da un testimonio de fe más grande que si todos los días saliera a predicar, porque son profesionales con licenciaturas y maestrías que trabajan aun cuando muchas veces no tenemos dinero para continuar; por eso decimos que la palabra convence, pero el testimonio arrastra».
