Los obispos de Michoacán se han reunido recientemente para reflexionar sobre la difícil situación que vive el estado. En su reunión de oración y estudio el tema central fue: «Cómo evangelizar en tiempos difíciles, en un ambiente marcado por la violencia»

Don Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia, señaló en su comentario semanal que los obispos de la provincia eclesiástica quisieron «tomar conciencia no sólo de la situación que tanto lastima a nuestras comunidades, sino sobre todo de las raíces de este fenómeno que parece cada día acrecentarse entre nosotros».

El arzobispo de Morelia expresó que los testimonios que han recibido de los sacerdotes que viven situaciones terribles con su pueblo, y el conocimiento de las cifras altísimas de ilícitos de todo tipo que se cometen impunemente, «nos sensibilizaron sobre la gravedad de los hechos. Los sentimientos de impotencia y rabia, frustración y desesperanza, miedo y rencor, parecerían prevalecer y obscurecer el panorama».

Los obispos michoacanos señalan que «como hombres de fe, reafirmamos nuestra convicción de que es posible, con la ayuda de Dios y una acción conjunta inteligente, encontrar caminos para superar y vencer esta dinámica destructora e ir poniendo cimientos de una nueva sociedad. El Evangelio tiene la fuerza para transformar a las personas y sigue siendo Buena Noticia para nuestro tiempo».

«Como pastores, nos hemos motivado a ser pregoneros y constructores de paz; nos hemos comprometido a seguir trabajando en nuestra tarea principal: la formación de discípulos misioneros de Jesús que vivan y transmitan los valores del Reino de Dios. El trabajo apostólico ha de ser cercano a la gente, acompañando a las familias, a los niños, adolescentes y jóvenes, formando y educando la conciencia de nuestros laicos, haciendo de nuestros grupos fermento de la sociedad».

«La verdad y el amor no se oponen, más bien se necesitan mutuamente; la justicia y la paz se encuentran y se besan, como dice la Sagrada Escritura. No puede haber igualdad y respeto a los derechos de todos mientras no nos reconozcamos hermanos e hijos de un mismo Padre. Es una ilusión querer construir una casa de sólidos cimientos, habitable para todos, si nos alejamos de Dios», dijo Don Alberto en su mensaje.

La Provincia Eclesiástica de Morelia está conformada por la arquidiócesis de Morelia y las diócesis de Apatzingán, Ciudad Lázaro Cárdenas, Tacámbaro y Zamora.

 

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