El Observador |

Desde 2008 la Red Ecuménica del Agua (REDA), impulsada por el Consejo Mundial de Iglesias (CIMI), ha proporcionado reflexiones teológicas semanales y otros recursos relacionados con el agua para las siete semanas de Cuaresma y para el Día Mundial del Agua, el 22 de marzo. El objetivo es reflexionar sobre cómo podemos ser mejores administradores de la creación de Dios y vivir el amor de Dios en nuestras relaciones con los demás.

Según la tradición cristiana la Cuaresma es un tiempo de preparación para la celebración de la muerte y la resurrección de Cristo. Durante este período muchas personas ayunan y practican la moderación o la abnegación para centrarse en la conversión y consagrarse a Dios. Mientras que el agua tiene un fuerte significado espiritual en la tradición cristiana como un regalo de Dios, este escaso recurso se ve amenazado y negado a millones de personas en todo el mundo.

Desde la X Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias en 2013, el Consejo ha iniciado una «peregrinación de justicia y paz», llevando a la REDA a profundizar en su inspiración teológica y en su motivación para implicarse en las cuestiones relacionadas con la justicia del agua. Por lo tanto, en consonancia con el año anterior, el tema de las Siete Semanas para el Agua 2015 es «Hacia la justicia del agua: una peregrinación de justicia y paz».

En su mensaje de convocatoria,el CIMI afirmó: “Queremos avanzar unidos. Desafiados por nuestras experiencias en Busan, desafiamos a nuestra vez a todas las personas de buena voluntad a poner los dones que han recibido de Dios al servicio de acciones transformadoras. Esta Asamblea llama a nuestras hermanas y a nuestros hermanos a unirse a nosotros en nuestra peregrinación. Que las iglesias sean lugares de sanación y de compasión y que sea posible sembrar las Buenas Nuevas para que la justicia crezca y la paz profunda de Dios reine en el mundo”.

 

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