Por Arturo Maximiliano
La modernidad también nos trae nuevos delitos y ahora que estamos responsablemente en cuarentena quizá seamos caldo de cultivo para los delitos electrónicos.
Hoy no debemos estar en la calle, pero la delincuencia puede atacarnos por internet, en nuestro correo, vía mensaje o WhatsApp.
¿Pero cómo? Quizá hayas oído hablar del phishing y del robo de identidad, término informático el primero que se le da a la obtención ilegal de información confidencial como pueden ser contraseñas, número de tarjeta y otros datos, que son utilizados luego para suplantar tu identidad o para venderlos.
La manera como te extraen esa información viene normalmente disfrazada de algún correo electrónico que parece ser de tu banco o empresa con la que tengas algún vínculo comercial y financiero, lo cual hacen también a través de mensajes en tu celular o incluso de llamadas telefónicas.
Los datos que obtienen se usan para cometer varios ilícitos, como la falsificación de la credencial de elector, dar datos falsos a la autoridad fiscal, obtener un alta en el registro federal de contribuyentes, abrir cuentas bancarias con objeto de defraudación fiscal, solicitar créditos automotrices o hipotecarios, entre otras cosas.
Para evitar el robo de identidad y el phishing podemos tomar medidas como las siguientes:
Ten cuidado con los correos electrónicos. Seguramente habrás recibido muchos correos de personas que no conoces ofreciéndote todo tipo de servicios o invitaciones.Algunos de estos correos pueden parecer que son de tu banco u ofertas muy muy atractivas, en los cuales te solicitan validar datos, pero en realidad es una manera de acceder a tu información y con ella comenzar el proceso de robo de identidad. No los abras, es, digamos, como abrir tu casa a un extraño. Acciones similares se hacen por teléfono, por lo que debes evitar dar este tipo de datos, salvo cuando tú hayas hecho la llamada para reportar alguna situación con tu tarjeta o tu cuenta.
Contrata la Alerta de Buró de Crédito. Se trata de una herramienta que te notifica si alguien solicita un reporte de tu historial crediticio. Si no eres tú quien los está haciendo o una institución a quien hayas autorizado para hacerlo es muy probable que alguien quisiera estar robando tu identidad.
Toma tu tiempo para revisar tu reporte especial de Buró de Crédito y cancela los créditos que no son tuyos. Condusef tiene un procedimiento llamado PORI (Protocolo por Robo de Identidad) donde se cita a la persona y a la institución para checar que haya coincidencia con la persona que supuestamente tiene el crédito y, de no ser así, entonces se cancelan los mismos en el historial crediticio.
Verifica tu estatus fiscal. Si tienes alguna sospecha de que tus datos personales han sido mal utilizados es importante que revises tu estatus fiscal, para lo cual puedes apoyarte en la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente.
La tecnología, y en particular el internet, son aliados, hoy más que nunca; sólo toma las previsiones necesarias para que no muerdas el anzuelo del phishing y te pesquen distraído.
Publicado en la edición semanal digital de El Observador del 3 de mayo de 2020. No. 1295