No todos los niños son iguales, así que no a todos les llegarán a gustar los mismos libros. Los papás pueden probar dándoles novelas o cuentos de diversos estilos para ayudarlos a descubrir cuál es el que mejor les va.

De 0 a 3 años

Se recomiendan libros que posean imágenes llamativas y coloridas, incluso con estímulos táctiles, como hojas con distintas texturas.

De 3 a 6 años

Que los libros sean sencillos y sigan teniendo ilustraciones llamativas. Para esta edad son buenos los cuentos de los hermanos Grimm: Caperucita Roja, Los tres cerditos, Cenicienta, Hansel y Gretel, Blancanieves, etc.

De 6 a 9 años

No son clásicos, pero se recomienda, por ejemplo, Aventuras de san Juan Bosco, del P. Eliécer Sálesman; El día que desaparecieron los significados, de Gilberto Hernández García, y Ángela y el Niño Jesús, de Frank McCourt.

Entre los clásicos se puede incluir Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll; Heidi, de Johanna Spyri; Pinocho, de Carlo Collodi; Corazón, diario de un niño, de Edmondo de Amicis, u Hombrecitos, de Louisa M. Alcott.

A partir de los 10 años

A esta edad ya se pueden ir introduciendo libros clásicos con historias o narraciones más complejas. Aquí el universo de libros recomendables es enorme.

Están, por ejemplo, cuentos de Oscar Wilde como El gigante egoísta, El príncipe feliz o El ruiseñor y la rosa; y, desde luego, El fantasma de Canterville.

Entre los libros de aventuras que tienen como protagonistas a niños o adolescentes varones, figuran El libro de las tierras vírgenes y Capitanes intrépidos, ambos de Rudyard Kipling; las divertidísimas Aventuras de Tom Sawyer, de Mark Twain; La isla del tesoro, de Robert Louis Stevenson, o Un capitán de quince años, de Julio Verne.

Con protagonistas niñas o adolescentes mujeres, se recomienda el Diario de Ana Frank; la serie de libros de Laura Ingalls Wilder (La casita del bosque, La casita de la pradera, A orillas del río Plum, etc.), o Mujercitas y Más cosas de mujercitas (o Aquellas mujercitas), de Louisa M. Alcott.

Para adolescentes

Entre los 14 y 16 años es más fácil que los lectores vayan aceptando historias de aventuras o misterio en las que los protagonistas son adultos; como Las Aventuras de Sherlock Holmes; novelas de Emilio Salgari, como El continente misterioso, La capitana del Yucatán, Los náufragos del Oregón, Sandokán, El corsario negro, El león de Damasco, Las hijas de los faraones, Los tigres de la Malasia, etc. Y, por supuesto, las famosas obras de Julio Verne: Veinte mil leguas de viaje submarino, Viaje al centro de la Tierra, De la Tierra a la Luna, La vuelta al mundo en ochenta días, Cinco semanas en globo o Miguel Strogoff.

Para Jóvenes

Todos los libros mencionados hasta aquí pueden ser una delicia para niños, adolescentes y adultos.

Pero sin duda hay algunas obras que se saborean mucho mejor conforme se alcanza la mayoría de edad.

No es lo mismo, por ejemplo, leer El principito, de Antoine de Saint-Exupéry, entre los 12 o 14 años que entre los 18 o 20; los del primer grupo quizá lo verán como un cuento demasiado sencillo; los del segundo, como una obra tan sublime que es probable que les arranque muchas lágrimas.

Para los jóvenes se recomiendan novelas ya más descriptivas, como El hobbit y El Señor de los Anillos, de J. R. R. Tolkien, o las de Jane Austin, experta en el retrato de personajes y situaciones cotidianas: Emma, Orgullo y prejuicio, Sensatez y sentimientos, etc. Desde luego, las clásicas de Ray Bradbury: Crónicas marcianas, El hombre ilustrado, Fahrenheit 451, El vino del estío, etc. Y los jocosos enfrentamientos entre el sacerdote católico Don Camilo y el comunista Peponne en la serie de libros de Giovanni Guareschi: Don Camilo, El regreso de Don Camilo, El camarada Don Camilo, etc.

También se recomiendan incursiones en el guión de teatro. Por ejemplo, la divertida y ligera obra La importancia de llamarse Ernesto, de Oscar Wilde; o, si se tiene ya suficiente madurez, la sobrecogedora obra Las brujas de Salem, de Arthur Miller.

Supervivencia

Dado que el supervivencialismo está de moda, ya sea por una visión más ecologista, por la caída de la economía, por los rumores de guerra, etc., incluimos aquí algunas novelas clásicas para adolescentes y adultos, relacionadas con la supervivencia:

Robinson Crusoe, de Daniel Defoe; La isla misteriosa, de Julio Verne; El Robinsón suizo, de Johann Wyss, sobre el naufragio de una familia; Dos años de vacaciones, de Julio Verne, sobre 15 niños y adolescentes que deben sobrevivir en una isla desierta; y la sobrecogedora novela El señor de las moscas, de William Golding, en la que un grupo de menores de edad, que sobreviven en una isla a un avionazo durante una guerra nuclear, forman una sociedad que acaba en una lucha entre la civilización y la barbarie.

TEMA DE LA SEMANA: «LA LECTURA Y EL LIBRO»

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 3 de abril de 2022 No. 1395

Por favor, síguenos y comparte: