La serpiente de bronce que hizo Moisés por orden divina fue la primera imagen milagrosa que ha existido, pues quien era mordido por una culebra venenosa y miraba la estatua, se salvaba de la muerte (Números 21, 8-9).
No es que la imagen de la serpiente realizara la curación, como tampoco era la sombra de san Pedro (Hechos 5, 15) o los pañuelos y delantales de san Pablo (Hechos 19, 11-12) los que sanaban a los enfermos, sino que siempre es Dios el único que realiza los prodigios, aunque se valga de la intercesión de los santos, de lugares, de objetos religiosos, etc.
Los acontecimientos cristianos extraordinarios en torno a imágenes también existen en estos tiempos. Aquí hay algunos:
Rostro de Cristo
En la parroquia de Cristo Rey, en Vilakkannur, Kerala (India), el padre Thomas Pathickal celebraba la Misa el 24 de noviembre de 2013 cuando, al elevar la Hostia consagrada vio que ésta “se hizo grande y más brillante, y una cara apareció inmediatamente”; era el rostro de Jesús que quedó grabado, y esto lo vieron cientos de feligreses. La arquidiócesis realizó una investigación, declarando en 2018 la autenticidad del milagro, y exhibiéndola a la adoración pública.
No está, pero se ve
En la capilla del santuario de Alta Gracia, en Córdoba, Argentina, había en el nicho central una imagen de la Virgen de Lourdes, pero fue retirada en 2011; sin embargo, al entrar al recinto se ve la imagen tridimensional, y el fenómeno se puede captar en fotografías. Si se camina hacia el altar, se ve que el nicho está vacío.
Once imágenes lloran
Entre el 21 y el 26 de abril del 2018, un total de once imágenes marianas —nueve de la Virgen de Fátima, una de nuestra Madre del Buen Consejo y otra de san José— lloraron en diversas casas de los Heraldos del Evangelio (Caballeros de la Virgen), floreciente sociedad de vida apostólica: en Costa Rica lloraron cinco imágenes de la Virgen, incluso varias veces al día; en Guatemala, cuatro imágenes de la Madre de Dios y una de san José; y, en España, una la Virgen de Fátima, pero en este caso no lloró lágrimas sino sangre.
Exuda aceite fragante
El 6 de agosto de 2019, en el templo católico melquita de San Simeón el Estilita, en Windsor, Ontario (Canadá), el grupo de oración juvenil parroquial se dio cuenta de que de la imagen llamada “icono sagrado del cáliz inagotable” goteaba una sustancia. Conforme llegaban más feligreses a orar, el fenómeno se hizo más evidente, y del aceite que brotaba de la imagen se desprendía una fragancia. El prodigio se repite con frecuencia, especialmente a las 3 de la mañana.
Una imagen del niño
Un franciscano de Cava dei Tirreni (cerca de Salerno, Italia) compró en Israel, en octubre de 2010, una imagen del Niño Jesús. Regresó a su convento en Italia y, sin abrir el paquete, se fue a dormir. Una voz suave lo despertó: “¡Ábreme, me ahogo!”. Turbado, abrió el paquete y encontró que la imagen del Niño había llorado sangre. Un análisis encontró que es sangre idéntica a la de la Sábana Santa de Turín.
Emitió destellos
En la ciudad de Puerto Saíd, Egipto, ante una imagen de la Virgen, venerada por católicos, ortodoxos y musulmanes, una familia oraba cuando la imagen destelló en varias ocasiones, de forma parecida al milagro del sol. Se puede ver en
Las abejas respetan
En 2007 el piadoso apicultor griego Sidoros Ţiminis, en Kapandriti puso un icono de la Virgen en su colmena, y las abejas construyeron sus celdas cuidadosamente, sin tapar la imagen. Desde entonces coloca iconos en sus colmenas, tanto de Cristo como de la Virgen y de ángeles, y las abejas respetan las imágenes religiosas.
TEMA DE LA SEMANA: «IMÁGENES, SÍ; IDOLATRÍA, NO»
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 17 de julio de 2022 No. 1410