Por Mary Velázquez Dorantes
En las tragedias de la humanidad Dios está presente, nunca ha olvidado a su creación. Y actúa cuando nosotros pedimos su intercesión a favor de nuestro hermano; la Biblia está llena de ejemplos en los cuales Dios accedió a través de la oración para salvar a los hombres, la oración que nosotros podemos hacer por las necesidades de nuestra familia, amigos, vecinos, siempre es escuchada, se llama oración de intercesión, y está dirigida a modo de súplica profunda ante la misericordia de nuestro creador, es un puente de comunicación con Dios directo, porque ponemos las necesidades de nuestros conocidos en el plan divino, sin caprichos o arrebatos. Se trata de una oración que da fortaleza a los cristianos para poder ayudar a los otros. Cuando estamos frente a una calamidad, cuando el futuro comienza a verse gris, cuando la duda nos aleja de la fe si la oración de intercesión se realiza Dios comienza a escribir nuevamente nuestras historias.
ORAR CON EL CORAZÓN CONFIADO
No existe ninguna oración desechada por Dios, pero cuando ponemos la confianza en Dios, cuando nuestra fe aumenta nuestra esperanza y pedimos por el bien del otro, cuando guardamos silencio profundo y comenzamos un diálogo con el Creador sabiendo que seremos escuchados, es en ese momento que la oración de intercesión es escuchada, y no se trata únicamente de pedir por las necesidades del hermano, sino también de dar gracias por todo aquello -que aunque parece incomprensible-,esta sucediendo. Gratitud y petición obran con palabras sencillas, recuerda que estamos conversando con nuestro Padre, no estamos haciendo un exhibición de palabras complejas o ideas rebuscadas, el corazón confiado es mucho más valioso que los adornos de nuestras palabras.
ES UNA ORACIÓN DE CERCANÍA
El Catecismo de la Iglesia Católica señala que la oración de intercesión es la oración más cercana a Jesús, porque Él es el máximo exponente de la intercesión frente al Padre. Si comenzaros nuestra oración invitando a Jesús a que nos ayude a interceder por una situación, adversidad, enfermedad, problema moral o espiritual, el camino orante es más fuerte, además de que la oración de intercesión debe ser una oración de perseverancia, porque Jesús nunca se cansó de pedir por la humanidad ante su Padre.
INTERCEDER POR EL OTRO
Cuando el dolor del otro nos conmueve, cuando la pena de aquellos que están fuera de nosotros nos embarga, es momento de interceder, con un corazón puro, con una actitud de arrepentimiento, con la mirada puesta en la misericordia divina. Pedir para que Dios y su voluntad actúen en la vida de los demás, sin importar si nosotros salimos beneficiados, o si nuestra oración será reconocida. Todos hemos sido llamados intercesores por la acción del Espíritu Santo en nuestros corazones, y pedir al Padre otro otros es una tarea amorosa de cristianos.
PASOS PARA REALIZAR UNA ORACIÓN INTERCESORA
• Busca un espacio de silencio en el día o la noche.
• Pide que la misericordia de Dios se manifieste en la vida de los otros.
• Ora pensando que Dios observa a los demás a través de ti.
• Elige un pasaje bíblico y pide que el Espíritu Santo actué a través de la oración que estás ejecutando.
• Se perseverante, no tengas miedo y aprende a confiar en Dios.