Hoy entrevistamos al escritor católico Claudio de Castro, colaborador de la Agencia Católica Mundial Aleteia, solía publicar en El Observador y hoy es autor de una enorme cantidad de libros católicos de crecimiento espiritual. Hablaremos con él de la sanación física, espiritual por la fe y de su reciente y muy buscado libro sobre “el Poder de la fe”.
Por Jaime Septién
Háblanos un poco de ti Claudio.
▶ Me llamo Claudio de Castro, soy un escritor católico de Panamá, estoy casado, mi esposa Vida y yo tenemos 4 hijos: Claudio Guillermo, Ana Belén, José Miguel y Luis Felipe, tenemos también una bella nieta que alegra nuestros días, Ana Sofía. Los que son abuelos sabrán a lo que me refiero.
Desde hace algunos años publico libros de crecimiento personal y espiritual en el portal de Amazon. Siento la necesidad de escribir y compartir las maravillas que he descubierto en nuestra fe, nuestra Iglesia católica y en la vida que es un regalo de Dios, un don que se nos da.
Dios ha tocado mi vida y he visto milagros extraordinarios, por eso escribo constantemente y hablo de ellos. Todos mis libros son vivenciales, están llenos de relatos, testimonios, oraciones y reflexiones católicas.
¿De qué tratan tus libros?
▶ Dios es un tema inagotable, siempre nuevo. Su amor es infinito y nos ama. ¡Qué maravilla poder saberlo! Todos mis libros hablan de Él. Siempre que lo meditas descubres algo nuevo, diferente. Mi esposa Vida dice que bastaría leer un libro mío porque todos al final dicen exactamente lo mismo: “Dios te ama. Eres especial para Él”.
Tengo cuatro temas que rondan mis obras: Los sacramentos de la Iglesia pues son un Tesoro; la búsqueda de Dios; la amistad con el buen Jesús en el Sagrario y la santidad para ser felices.
Háblanos de la Fe. ¿Crees que el poder de la fe nos puede sanar?
▶ Hay momentos en la vida en que estamos necesitados de un milagro… Hay momentos en que no sabemos qué hacer o cómo salir adelante. Creo que si tuviésemos vida de oración, confianza en Dios y un poquito más de fe, nuestras vidas serían diferentes. La fe no solo nos puede sanar, nos fortalece, nos hace mejores y nos ayuda a vivir a plenitud.
En Marcos 11, 24 nos “aseguran” las Sagradas Escrituras: “Por eso les digo: todo lo que pidan en la oración, crean que ya lo han recibido y lo obtendrán.” En pocas palabras, si pides con fe, si es para tu bien, lo obtendrás.
¿Y cómo obtenemos esa Fe?
▶ Es una pregunta maravillosa. Volvamos nuestras miradas a las Escrituras donde suelo encontrar respuestas a la mayoría de mis inquietudes. Si abres tu Biblia en Romanos 10, 17 hallaremos la respuesta a esa interesante pregunta: “Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo.”
Por este motivo conviene que leas la Biblia y en ella escuches las palabras de Jesús, lo conozcas mejor. Y luego mantengas viva esa fe. ¿Cómo? Nuevamente acudimos a las Sagradas Escrituras. Debes hacer obras de misericordia, caridad y amor.
¿Aun hoy ocurren milagros de sanaciones?
▶ He visto algunos milagros y leído muchos de mis lectores que me los comparten y son verdaderamente extraordinario. En mi libro lo dejo claro, vivimos tiempos de milagros. Para mí como católico y escritor, despertar cada mañana es un verdadero milagro y más sabiendo que en Dios vivimos, nos movemos y existimos. Es lo que deseo transmitir en el libro, gratitud. Debemos agradecer a Dios tantos favores inmerecidos tantos milagros, gracias y dones.
Tu pregunta me remonta al caluroso verano del 2012. Recuerdo que me encontraba pasando unos días de vacaciones con mi familia en una casa grande, alquilada, cerca de la playa. Me gustaba mucho madrugar, para rezar y ver el cielo estrellado, limpio, despejado.
Me acostaba sobre una suave hamaca tejida a manos, de algodón para disfrutar el espectáculo celestial, mi esposa Vida en otra hamaca a mi lado, me acompañaba y escuchábamos absortos programas católicos en una radio de onda corta, hasta que amanecía.
Una de esas madrugadas sintonicé con mi radio una emisora que entrevistaba a un sacerdote y misionero católico canadiense llamado Emiliano Tardif. Parecía muy interesante y quedamos enganchados. Contaba el padre Tardif que pasó una época de su vida muy delicado de salud. Tenía una tuberculosis pulmonar aguda que había lesionado gravemente sus pulmones.
Estaba seguro que moríay lo habíaaceptado. Un día llegaron a verlo al hospital unas personas peculiares, primero un sacerdote que quería tomarle una fotografía para una revista y un artículo: “Cómo vivir con su enfermedad” en la que él aceptaba y ofrecía su dolor.
Aun no se marchaba este sacerdote cuando entraron cinco seglares de la Renovación Carismática a su habitación. Venían a orar por él. “Vamos a hacer lo que dice el Evangelio en Marcos 16: “impondrán las manos sobre los enfermos y quedarán sanos”. El padre Tardif cuenta que no creía mucho en estas cosas, pero siendo sacerdote, por educación aceptó. A los 4 días ocurrió un milagro inesperado que los médicos no supieron explicar, estaba completamente sanado y como le profetizaron, se convirtió en un testigo del amor de Jesús.
Su historia me dejó muy impresionado y reflexioné largo rato. Así terminé escribiendo y publicando el libro Usa el Poder de la Fe para Sanar y llenar tu vida de sentido y alegría.
¿Habla tu libro sobre el sufrimiento y la cruz?
▶ Santa Rosa de Lima dijo una vez que la cruz es la escalera al cielo. Le creo. Mi nuevo libro del Poder de la Fe, también habla sobre: Esa cruz cotidiana, porque es parte de la vida; la ansiedad y cómo vencerla con la fe; la soledad que muchos sufren, cómo no dejar que te afecte; la depresión y la pérdida del sentido de la vida.
Todos en alguna medida sufrimos. Unos por la soledad, perder un familiar cercano y querido otros por quedar cesantes, sin trabajo, otros por una enfermedad que los incomoda.
Cuando me escribe alguna persona que sufre de soledad, o está enferma o tiene ansiedad, o no encuentra su camino o un propósito en su vida, siento por ellos una gran ternura y compasión pues somos hermanos, hijos de un mismo Dios. Y veo en su entorno la presencia de Dios, su cercanía, porque Él nunca nos abandona.
Les recomiendo ofrecer todos sus sufrimientos, inquietudes, dolores, por la salvación de las almas y la conversión de los pobres pecadores, la santificación de nuestros sacerdotes, la santidad en la familia y nuestras Hermanas las Benditas almas del Purgatorio, que son muy agradecidas.
¿Tiene valor el sufrimiento?
▶ Leí una vez que hay dos tipos de sufrimiento, el que es provocado por el pecado y solo nos trae desgracias y nos aleja de Dios y el que Dios permite para nuestro bienestar y redención. Éste último es un sufrimiento que da frutos de eternidad.
¿Cuál es el secreto para perseverar en la fe?
▶ No es algo nuevo ni que yo pueda inventar. Los grandes santos de nuestra iglesia, los héroes de la fe, lo sabían desde el principio: La confianza plena; la oración fervorosa y frecuente; el abandono en las manos paternales de Dios; la devoción y el cariño de un hijo a la Virgen María.
¿Tienes algún mensaje final para nuestros lectores?
▶ Sí, tengo algo importante que decirles. La Biblia, tiene más de 3,500 promesas para ti. Y todas se cumplen. Para poder sujetarte de esas promesas, primero debes conocerlas y para conocerlas debes leer la Biblia.
Hermano católico, lee la Biblia y recuerda siempre esto de Jesús:
“El soportó el castigo que nos trae la paz y por sus llagas hemos sido sanados.”
(Isaías 53, 5)
El dato: 175 títulos tiene -hasta el día de hoy- el escritor panameño.
