El proselitismo auténtico es obra de Dios y de su acción en las almas y de la cooperación humana

Como muchos se habrán dado cuenta, los vídeos de YouTube están siendo interrumpidos constantemente por anuncios de misioneros mormones con frases como: Soy Elder Ávila…, soy la hermana Palma Reyes…, etc.

Se trata de su más reciente método proselitista en Internet en los últimos dos años. Ahora no solo trabajan en las calles o tocando puertas sino también lo hacen de forma online para buscar captar más la atención de gente que no les conoce pero también para intentar confundir a más de uno (sobre todo católicos) presentándose como una Iglesia cristiana cuando realmente no lo es.

Se presentan como personas que desean ayudar a los demás, que quieren hablar de Dios contigo, para que luego dos misioneros vayan a tu casa y te presenten su evangelio, y de paso te dejaran el Libro del mormón. Hemos de recordar que uno de los rasgos fundamentales de las sectas o “nuevos movimientos religiosos” es que son “fanáticamente proselitistas”.

El padre Manuel Guerra en su obra Nuevos Movimientos Religiosos- Sectas, Editorial Eunsa, enseña que:

Puede decirse que en las sectas pertenece a estas últimas el proselitismo fanatista de sus miembros. De ordinario es lo más visible y lo que hace que a alguien lo califiquen de sectario a pesar de ser un rasgo menos esencial, ya que solo afecta a la comunicación a los otros de los propios convencimientos y creencias.

Continúa el autor diciendo:

Pero el cristiano como la Iglesia propone, no impone nada, respeta a las personas y las culturas, y se detiene ante el sagrario de la conciencia. Por ello el diálogo interreligiosos no viola la libertad ni siquiera en su forma de testimonio y de anuncio directo de Cristo y de las propias creencias.

El mismo autor en su obra Enciclopedia Católica de las Sectas cuando habla del término proselitismo, diferencia entre el bueno y el fanático o malo. El bueno es el que encontramos en las Escrituras y en los Santos:

El término proselitismo viene de la palabra griega prosélytos y pasó del judaísmo a la tradición cristiana. El término prosélytos aparece sólo cuatro veces en el Nuevo Testamento: una en San Mateo (23,15) y tres en los Hechos de los Apóstoles (2,11; 6,5; 13,43). El texto del Evangelio es en el que se expresa más claramente el alcance del término. Los escribas y fariseos se preocupaban de buscar personas que estuviesen en condiciones de entender y de vivir la fe en el único Dios. Es por tanto una palabra de profunda tradicción cristiana y de uso en la Iglesia, pero siempre bien entendida.

No se discute por tanto que se dé a conocer a Cristo, ni el Evangelio, el mismo Jesús nos mandó predicar su Evangelio Mateo 28:19-20: Vayan por todo el mundo y predicar mi evangelio a toda criatura, haced discípulos míos…”. Lo que se cuestiona y rechaza de todo esto es el modo de hacerlo. En el caso de los mormones, ellos de inicio usaban a los misioneros para ir casa por casa haciendo proselitismo o bien para pararte en un parque y contarte su testimonio de vida y animarte a ser uno de ellos, incluso llego un tiempo en que te regalaban el «libro del mormón» pues bien ahora añaden a todo ese marketing proselitista en Internet, en concreto en YouTube.

Ya no es solo en sus vídeos, sino en casi todos los vídeos más visitados y sobre todo de temática cristiana que reproduces, aparece un anuncio donde ellos se publicitan y hacen propagan de su “congregación”. Caen por tanto en un proselitismo pertinaz, insistente, buscando como «consumir su producto» que vendría a ser «como concertar una cita contigo para dar a conocer su evangelio». Hemos de recordar que ellos no son cristianos pues su bautismo no es válido. Esto se debe a que no creen en la Trinidad, y por tanto no se les puede considerar un grupo cristiano.

El proselitismo auténtico es obra de Dios y de su acción en las almas y de la cooperación humana, recordando siempre lo que enseñaba Benedicto XVI: La Iglesia no impone, sino que propone libremente la fe católica (Discurso a los Obispos de Asia Central en visita ad limina, 2 de octubre de 2008), una exposición clara y precisa de la verdad cristiana sin imposiciones, sin insistencias dejando libertad al hombre para elegir.

Con información de Religión en Libertad

 

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 9 de abril de 2023 No. 1448

Por favor, síguenos y comparte: