Como Iglesia que peregrina en México y el mundo, el pueblo de Guerrero necesita de nuestra ayuda, de nuestra oración y de nuestra solidaridad. Unámonos en oración por los que han sufrido, por los que han perdido a seres queridos, por los que se han quedado sin un techo. Pero la oración no es suficiente. Invitamos a cada uno de ustedes a que, en un gesto de amor, donemos a través de la RED NACIONAL CARITAS.