Entrevista a Luis Hernández, director de Voto Católico
Por Jaime Septién
Luis Hernández es licenciado en Derecho y postgraduado en Política Internacional, Economía, Finanzas y Negocios Internacionales, así como en Seguridad Nacional. Actualmente colabora en diversos medios de comunicación y es director de la plataforma Voto Católico.
–¿Cómo ves, desde tu perspectiva, el proceso electoral que se avecina?
Sin duda estamos frente a uno de los procesos electorales más importantes de nuestra historia, y no me refiero únicamente al número de electores que participaran o al universo de cargos que se eligen, lo cual ya en sí lo vuelve sumamente relevante. En estos comicios, además se decidirá la continuidad de un modelo ideológico que en los últimos cinco años ha fracturado sensiblemente el orden jurídico e institucional construido a lo largo del siglo XX y ha atentado contra la vida, la familia, la dignidad humana, las libertades fundamentales, la legalidad, la salud, seguridad y el derecho a la educación de calidad de los niños y jóvenes.
–¿Qué otro tema te preocupa?
El que se podría agudizar el profundo proceso de división social iniciado por Morena desde la campaña presidencial de 2018 y que hoy ha permeado prácticamente en todos los sectores de la sociedad, incluidos los grupos y comunidades católicas.
–¿En tu blog, en tu trabajo, en tu vida periodística y de activista social, qué problemas son los más importantes que tiene que enfrentar México el próximo 2 de junio?
Unidad, Participación e Información. Un reto tan importante como el que enfrentaremos el próximo 2 de junio requiere encontrarnos unidos, conscientes y convencidos del México que con nuestro voto deseamos construir para nuestras familias y nuestros hijos.
–Durante muchos años la abstención ha sido la que ha ganado en las elecciones ¿no es así?
La participación del mayor número de mexicanos debe ser el imperativo en estas elecciones, desde los diferentes frentes informativos o sociales en los que participemos tenemos la gran responsabilidad de concientizar a nuestras audiencias, familiares y amigos sobre la importancia de participar, de decidir por la opción política registrada que en conciencia consideren sea la mejor opción para nuestro país. A pesar del ruido mediático que desde su inicio ha rodeado a este proceso electoral, debemos propiciar que la participación sea lo más informada, consciente y razonada posible.
–A los católicos mexicanos –dicen algunos pensadores– el régimen los metió en un gueto y seguimos metidos en ese gueto. ¿Tú lo ves así o hay un catolicismo que despierta?
Me parece que existe un catolicismo que está despertando, quizás ahora se encuentre un poco dividido y desarticulado por las inercias propias del proceso electoral, pero empieza a despertar.
–¿Puede extenderse este despertar?
El reto en este sentido será lograr que los católicos decidamos actuar en todos los ámbitos de la vida social a los que nos interpela la Doctrina Social de la Iglesia y salir del círculo de vida y familia en el que por momentos parecemos estar encasillados.
–¿Qué hay de la participación de los jóvenes católicos? ¿Se te ocurre alguna estrategia para incentivarlos y que se involucren en la vida pública?
A pesar del optimismo que nos transmiten eventos tan importantes como la más reciente Peregrinación Juvenil al Cerro del Cubilete, que este año congregó a más de 40 mil jóvenes que se pronunciaron a favor de la libertad religiosa, es indudable que los jóvenes desde hace varios años se rehúsan a participar en la vida pública de sus comunidades, del país. La narrativa utilizada por los medios de comunicación, los partidos políticos y las organizaciones sociales para transmitir la realidad nacional, no logra conectar con ellos. Palabras como ideologías, derecha, izquierda, progresistas, conservadores parecen ya no representar nada para la mayoría de los jóvenes.
–¿Cómo darle la vuelta a esta situación?
Tal vez sea necesario empezar por incentivar la generación de nuevos contenidos, foros espacios de participación donde ellos mismos a partir de sus intereses, lenguaje, necesidades y causas, encuentren el sentido y utilidad de participar en la vida pública.
–A la hora de elegir candidatos, ¿qué aconsejas tú que tenga en la mente y en el corazón un católico en México?
Lo primero que como católicos debemos tener en la mente y el corazón al momento de elegir candidatos es tener plena conciencia de la importancia de nuestro voto, que más allá de un deber cívico o una obligación como creyentes, es la expresión del futuro que anhelamos para nuestras familias, nuestros hijos. No existe una madre, un padre, hijo o hermano que no desee el mayor bien posible para sus seres queridos.
–¿Votar por el mal menor o por el bien posible?
En un proceso electoral tan importante como el que se avecina eso es a lo que como hombres y mujeres de bien debemos aspirar: lograr de cara a las enseñanzas del Evangelio y la Doctrina Social de la Iglesia, el mayor bien posible para México, nuestra familia, hijos y nietos. Para ello nuestra decisión debe ser lo más formada, informada y razonada que sea posible.
En la plataforma Voto Católico, buscaremos contribuir a este discernimiento, poniendo próximamente al alcance de la comunidad católica y la sociedad en general información que les permita conocer la postura de los diferentes candidatos registrados sobre temas de vida, familia y libertades fundamentales.
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 18 de febrero de 2024 No. 1493