Debido a «la falta de acción» del gobierno de los Estados Unidos frente al cada vez más creciente y grave problema de los inmigrantes, diversas Iglesias anunciaron la creación de un movimiento nacional para ofrecer refugio a los migrantes indocumentados. Se trata de una nueva versión del movimiento Santuario, que en años pasados ya hizo una labor de protección de personas indocumentadas con riesgo inminente de ser deportadas.
El movimiento inició en dos iglesias de Arizona y ya se ha extendido por todo el país en ciudades como Denver, Tucson, Phoenix, Nueva York, Filadelfia, Chicago, entre otras. En total son 24 congregaciones que ofrecen refugio físico a los migrantes indocumentados, y 60 las que ofrecerán apoyo a las familias afectadas por las deportaciones.
Estas ayudas se darán, mientras se espera que el gobierno de Barack Obama anuncie antes de fin de año, alguna solución para la situación de aproximadamente 11 millones de indocumentados, que viven actualmente en Estados Unidos.
Las Iglesias de diversas denominaciones han dicho que consideran es su “obligación dar refugio a los inmigrantes en peligro de deportación, después de que Obama aplazara su decreto en materia migratoria hasta después de las elecciones legislativas de noviembre”.
“El movimiento Santuario es una respuesta a la falta de acción”, afirmó el congresista demócrata por Arizona Raúl Grijalva, quien lamentó la politización de la cuestión migratoria, lo que ha provocado que “la gente se convierta en números, se minimicen las consecuencias de la separación de las familias y se trate a los niños que huyen de la violencia como invasores.”
Agencias
El reverendo Gradye Parsons, representante de la iglesia presbiteriana de EU, explicó que las organizaciones religiosas han decidido brindar apoyo pues no se puede “seguir soportando la pérdida diaria de hermanos y hermanas” debido a su deportación a sus países de origen.