Por Rubicela Muñiz
Además de vivir con temor en un país ajeno que intentan hacer suyo. De hacer frente al sistema político y judicial. De traspasar la barrera del idioma y establecerse. De encontrar un buen empleo, los migrantes mexicanos, centroamericanos y sudamericanos, deben luchar contra la enfermedad, los problemas familiares, la tristeza y la ansiedad.
Afortunadamente para ellos, existen organizaciones como Coalición Mexicana que trabaja sin descanso para proteger sus derechos. Asentados en Nueva York, se enfocan en convertirse en un proveedor nacional de integración de migrantes y otros servicios directos, así como en ser defensores nacionales de reformas progresistas de la migración. En concreto, ayudan a los migrantes a solicitar la nacionalidad, proporcionando ayuda directa a refugiados y asilados, y ofreciendo apoyo educativo a niños y familias indocumentadas, y mucho más.
Parte de estos servicios se centran en cuidar la salud mental de los migrantes con proyectos como “Amiga confidente”, un espacio en el que los latinos encuentran un refugio, una sonrisa, palabras de aliento, escucha activa o un abrazo a la distancia. Desde el 2024, la IBERO Puebla, a través de la Dra. Nora Gurrola Sánchez, logró hacer alianza con la Coalición Mexicana para sumarse a la atención psicológica integral, a través de una práctica supervisada en el marco clínico.
“Para mí siempre han sido importantes estos temas de migración y, a esto se le agrega el marco en el que ellos viven, la situación en la que ahora se están desarrollando. Hay algunas conflictivas que manejan como, la separación de su familia, problemas en el mismo nivel de trabajo. Tuve la oportunidad de conocer a la dirigente de Coalición Mexicana, Claudia Urey, y le pedí que nos pusiéramos de acuerdo para poder trabajar y unirnos en esta práctica”, compartió la Doctora Nora.
Una vez establecido el acuerdo entre ambas instituciones, la Dra. Nora, junto a las alumnas de octavo semestre de la Licenciatura en Psicología, ideó un proyecto personalizado con protocolos elaborados de acuerdo a sus necesidades.
En este primer año de trabajo, dividido en dos partes, han sido atendidos 46 latinos y latinas de México, Perú, República Dominicana, Honduras y Ecuador: 18 en el primer semestre y 28 en el segundo. La atención se brinda en línea, a través de Zoom, dos veces por semana hasta completar 10 sesiones de apoyo psicoemocional. Los migrantes acuden a las oficinas de Coalición Mexicana y desde ahí se conectan con la IBERO.
“Los conflictivas son variadas. Tienen problemas de ansiedad, depresión, problemas de duelos no resueltos por haberse cambiado de ciudad, por la alimentación y hasta por la propia cultura. Hay muchos conflictos de relaciones familiares. Ya tuvimos algunos casos de personas que tiene hijos que consumieron al famoso fentanilo y tiene a este hijo en cuidado especial por el deterioro que hay. Otro problema fuerte en Nueva York, y a nivel mundial, es la diabetes. Trabajamos con personas que perdieron un pie o que tienen problemas de la vista. Y ahora se suma el miedo a la deportación”, agregó la experta.
El apoyo psicoemocional va enfocado en fortalecer aspectos como: “Cuál es tu lugar seguro”, “cuáles son las experiencias que más te van a ayudar”. Incluyen trabajo de relajación, apoyo emocional como el abrazo de la mariposa, técnicas gestálticas. Todo lo que los pueda fortalecer.
“Esto no quiere decir que no habláramos con ellos de sus historias, que nos conmovían fuertemente, como la de un hombre que perdió una extremidad a causa de la diabetes y la de una familia cuyo hijo se quitó la vida”.
La Doctora Nora dice sentirse muy contenta por la respuesta de los migrantes en cada sesión y por la oportunidad de inculcar valores a los futuros profesionistas: “Es importante enseñar valores, el valor de la empatía, del trabajo y esto lo veo en esta práctica. El valor de sensibilizarnos con poblaciones diferentes. Yo considero que me llena, me hace sentirme muy satisfecha. Eso es lo que podría decir. Estoy satisfecha con el trabajo. Estamos pensando en cómo ir a más allá, desarrollando habilidades y, sobre todo, sirviendo, viendo cómo podemos apoyar. El objetivo es fortalecer a esta población y hacerles saber que no están solos”.
El programa gratuito “Amiga Confidente” se vuelve a reanudar en agosto para ayudar a los migrantes con los desafíos y realidades que enfrentan, para que puedan integrarse a su entorno sin afectar sus patrones de salud.
Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 29 de junio de 2025 No. 1564