Las noticias falsas existen desde hace mucho tiempo y también fueron construidas en tiempos de Jesús
Por Modesto Lule MSP
Hace muchos años vendían revistas donde presentaban noticias falsas y aunque sabía la gente que eran cosas inventadas, algo les movía a comprar.
Hoy mismo, muchos recibimos audios de personas que no conocemos, aunque nos los mandan conocidos. Audios y videos son los que más impactan. Creo que eso de la imagen se está convirtiendo en obsoleto o la gente ya comienza a saber que las fotos se pueden modificar. Claro que los audios y los videos también se pueden trucar pero muchas personas no lo asimilan.
Una mayoría de los que comparten esos audios o videos falsos son personas mayores, y los que no son tan mayores podemos distinguir que son personas no muy afines a las cuestiones tecnológicas y se dejan impresionar por la novedad.
Podemos incluir entre estas personas a religiosos, consagrados y sacerdotes que los atrapa la emoción y, movidos por esa emoción, comparten las cosas sin analizarlas. Cuando las personas se enteran u obtiene algo nuevo quieren de inmediato compartirlo sin tener un fundamento de si es o no verdadero.
Hay muchos grupos de personas que se denominan como “granjas” y su trabajo es generar noticias falsas para crear confusión y división de opiniones a partir de las cosas que se han compartido.
A estas “granjas” los contratan tanto de ambientes políticos, como del mundo artístico y hasta deportivo. En la Biblia encontramos un pasaje que desde aquellos tiempos destapa el tema de las noticias falsas. En la carta a Timoteo 6, 10 dice: “Porque el amor al dinero es raíz de toda clase de males; y hay quienes, por codicia, se han desviado de la fe y se han causado terribles sufrimientos”.
Las noticias falsas existen desde hace mucho tiempo y también fueron construidas en tiempos de Jesús. Basta mirar diferentes pasajes donde buscaban testigos falsos para desacreditar la verdad que él predicaba. Aun después de muerto Jesús en Mateo 28, 11-15 dice: “Mientras iban las mujeres, algunos soldados de la guardia llegaron a la ciudad y contaron a los jefes de los sacerdotes todo lo que había pasado. Estos jefes fueron a hablar con los ancianos, para ponerse de acuerdo con ellos. Y dieron mucho dinero a los soldados, a quienes advirtieron: –Ustedes digan que durante la noche, mientras ustedes dormían, los discípulos de Jesús vinieron y robaron el cuerpo y si el gobernador se entera de esto, nosotros lo convenceremos, y a ustedes les evitaremos dificultades.
La invitación de hoy es a reflexionar lo que estamos compartiendo en nuestras redes sociales o en el círculo de amistades. La palabra “discernir” viene del latín discernere y significa “distinguir”.
La palabra “criterio” viene del griego kriterion y significa “norma para conocer la verdad”. Ojalá tengamos más discernimiento y criterio para compartir las cosas que nos llegan. No hay que dejarse llevar por todo lo que traiga la marca de la fe ni tampoco por todo aquello que a simple vista parece asombroso y deslumbrante.
Publicado en la edición semanal digital de El Observador del 3 de mayo de 2020. No. 1295