Por José Antonio Varela Vidal*

Siguiendo la regla de san Benito, su fundador, las monjas de clausura del Monasterio de la Ascensión de Zamora (España), intercalan entre sus largas horas de oración un trabajo muy valioso: la edición de libros bajo el sello de Monte Casino.

Es así como, el “Ora et labora” benedictino, se cumple de forma adecuada en esta tarea de escribir, seleccionar y editar textos para otros monasterios que lo requieren, así como para presbíteros, religiosos y laicos que hacen sus pedidos on line.

Una de las impulsoras de este “faro” de intelectualidad y espiritualidad que emana desde los muros del monasterio es Concha Galán de Mera, OSB. Una monja de profunda espiritualidad y simpatía evangélica quien además escribe sobre los temas más variados.

¿Cómo surge la iniciativa de fundar una editorial, al interior de un monasterio?

Madre Concha. La fundación del monasterio de las benedictinas en Zamora tiene lugar en 1961. Tras diversos ensayos, en 1967 aceptan el traspaso de una imprenta local. Los talleres abiertos al público también comienzan a hacer trabajos para la comunidad y para otros monasterios. Por ejemplo, los libros de rezo ya desde 1969 llevan el nombre de Ediciones Monte Casino.

¿Y seguiría la edición de nuevas publicaciones, referidas a la vida monástica?

▶ Sí. Posteriormente, surge la idea de difundir la espiritualidad monástica. Así en 1974 se imprimen y publican Recuerdos y sentencias de los monjes de Oriente y en 1975 se inicia la colección Espiritualidad Monástica. Fuentes y estudios con la Vida de San Antonio Abad escrita por san Atanasio.

Vemos entonces que a la oración y al trabajo diario (Ora et labora), los monjes y las monjas deben reservar tiempo para la lectura…

▶ San Benito da mucha importancia a la lectura. Ciertamente se privilegia la Escritura y sus comentarios transformados en teología monástica. Se puede contrastar en nuestra Regla que siempre se dedican tiempos a la lectura en las jornadas diarias. Igualmente, dentro de los monasterios hay amantes de la cultura en general que encuentran momentos no reglados para dedicarle tiempo.

Volviendo a ediciones Monte Casino, ¿nos puede describir su oferta editorial?

▶ Somos una editorial muy pequeñita. Toma su nombre de la famosa abadía italiana fundada por San Benito alrededor del año 529. En ella destacan dos colecciones de libros, una de espiritualidad monástica y otra de patrología. Generalmente, estas obras están escritas por monjes y monjas que las ofrecen a la editorial.

No será fácil decidirse por una obra o por otra…

▶ En comunidad valoramos su posible interés y procedemos o no a la aceptación, maquetación e impresión (en nuestros talleres de imprenta) y posterior difusión a otros monasterios o a alguna distribuidora.

Habrá también un público externo, interesado en este tipo de ediciones ¿no?

▶ Fuera de los monasterios hay muchas personas interesadas en este tipo de escritos. Por ello tenemos el envío directo a personas o librerías que los solicitan a través del correo electrónico o por teléfono.

¿Cuál es la “joya de la corona” de la editorial?

▶ Nosotras reservamos la “joya” para unos libros fuera de colección: el Breviario y Leccionarios Bienales de la liturgia monástica, que en muchos lugares fuera de los monasterios se adoptan como base de la Liturgia de las Horas.

¿Qué es aquello que no debería faltar en la formación permanente de la vida monástica?

▶ Nunca debería faltar la sabiduría que proviene de la lectura meditada de la Sagrada Escritura, la historia y espiritualidad monástica, así como un conocimiento amplio de la vida consagrada actual e interreligiosa. Sin perder de vista la actualización cultural que se sigue fuera del monasterio.

¿Siente que las jóvenes interesadas en la vida contemplativa son hoy más exigentes sobre el nivel intelectual y espiritual al interior de la clausura?

▶ En general, sí. El nivel cultural en España ha crecido en las últimas generaciones; por tanto, el salto adaptativo para una persona con estudios superiores a una comunidad de estudios primarios, por ejemplo, es un salto a un mayor vacío. Aunque cuando en una vocación existe una auténtica llamada de Dios, cualquier dificultad se acaba sorteando.

Se ve que ustedes, están dispuestas a llenar estas expectativas… ¿Qué diría a las jóvenes que sienten inquietud por una vida monástica?

▶ Venid a conocer esta forma específica de vivir la relación con el Dios de Jesús y la relación entre hermanas, en comunidad, basada en esa relación primera. No tengáis miedo a este viaje interior de vuelta a Dios. Proporciona una felicidad diferente, duradera e intensa.

*Periodista peruano. Miembro del Consejo Editorial Internacional de El Observador

Publicado en la edición semanal impresa de El Observador del 20 de noviembre de 2022 No. 1428

Por favor, síguenos y comparte: